Cuba raciona más los combustibles pese a mayores suministros de Venezuela

Cuba incrementa el racionamiento de combustibles para sus habitantes, a pesar de que las importaciones desde Venezuela han subido desde un promedio de 49.000 barriles diarios hasta los 91.000 barriles, ya que, según indican fuentes de su gobierno a Argus Media que, a raíz de las sanciones de Estados Unidos contra Pdvsa, el déficit de la isla a 35.000 barriles diarios, cuando inicialmente se habían estimado en 25.000 barriles.

Analistas del mercado energético señalan que Cuba monetiza alrededor de 90% del crudo que recibe de Venezuela, por lo que el suministro interno no es una prioridad, de manera que ahora se han tomando medidas adicionales de restricción del consumo y se anuncian castigos enérgicos contra el robo de gasolina y el creciente mercado negro, que se nutre con el crudo que llega de Venezuela.

Cuba había sorteado su estructural crisis de financiamiento interno con suministros venezolanos que alcanzaban a cerca de 100.000 barriles diarios, que se fueron reduciendo en la medida en que caía la producción de Pdvsa, hasta llegar a mínimos de 50.000 barriles por día. Ahora, el suministro ha vuelto a ascender, como resultado de que la petrolera venezolana tiene inventarios acumulados, por no poder comercializar la producción acumulada.

Según Argus, «Cuba ha buscado suministros alternativos de petróleo de Argelia, Rusia, Irán, Angola y Trinidad y Tobago, según varias declaraciones del gobierno desde 2017, pero los envíos requieren pagos en efectivo que el régimen antillano no tiene».

Venezuela ha mantenido a la refinería de Cienfuegos que es la principal fuente de combustibles en Cuba, a un costo estimado de alrededor 500 millones de dólares en varios años, según fuentes conocedoras de los procesos de refinación de crudos.

Esta planta tiene una capacidad de 65.000 barriles diarios, pero, con todo y las inversiones, produjo 37.000 barriles en 2018, según la información de Argus.