Casi US$ 5.000 millones: lo que podría ingresar a Venezuela si añade 200.000 bpd a su producción petrolera
Si Venezuela logra añadir 200.000 bpd a su producción petrolera, podría ingresar casi $5.000 millones al año, considerando un precio promedio de 69,09 $/barril.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos aprobó el 18 de octubre el levantamiento temporal de las sanciones impuestas a Venezuela, una medida que para el país petrolero significa extraer y exportar más crudo.
Sin embargo, para cualquier país petrolero aumentar la producción del llamado oro negro siempre se ha traducido en invertir grandes sumas de dinero y Venezuela no es un país que haya contado con esas inversiones en los últimos tiempos.
De ahí que la Administración de Información de Energía de Estados Unidos (EIA) haya publicado este lunes su punto de vista sobre la liberación de las sanciones y las implicaciones que tiene para Venezuela.
Desde luego, no han sido las más alentadoras, pero para lo pequeña que es hoy en día la economía de Venezuela sí podría ser algo significativo.
En opinión de la EIA, la mala gestión y la escasa inversión que ha tenido el sector energético de Venezuela limitarán el crecimiento de la producción de crudo a menos de 200.000 barriles de petróleo diarios (bpd) a finales de 2024, lo que requerirá más tiempo e inversión para un crecimiento adicional.
Se abre el grifo del petróleo
Pero aunque las estimaciones de la EIA no son las más optimistas, el hito del levantamiento de las sanciones no deja de ser una noticia positiva para la economía venezolana, veamos las razones:
En el peor de los escenarios si Venezuela logra añadir solo 200.000 bpd a su producción, podría equivaler al ingreso de casi 5.000 millones de dólares anuales, considerando que el precio promedio del petróleo venezolano (el barril merey, referencia dentro de la cesta OPEP) en los últimos tres meses ha sido de 69,09 dólares por barril.
Unos 5 mil millones de dólares sería casi equivalente al EBITDA percibido por la refinadora Citgo en 2022 (de 4.400 millones de dólares).
También hay que tener en cuenta que Venezuela ya no tendría que recurrir al mercado negro para vender su crudo, ni tampoco venderlo con descuento como venía realizando en los últimos cuatro años por el efecto de las sanciones estadounidenses.
Además, como las sanciones estadounidenses no permitían a los clientes realizar pagos directos a Venezuela, ésta tenía que recurrir a un sistema de trueque, en el que petroleras europeas como Eni y Repsol, por ejemplo, compraban crudo venezolano a cambio de combustible. Pero… eso ya sería cosa del pasado con el levantamiento de las sanciones durante los próximos seis meses.
Por su parte, las refinerías de la costa del Golfo de México de EEUU entrarían en escena. De acuerdo a la EIA, estas refinerías están bien preparadas para recibir el tipo de crudo que produce Venezuela, en su mayoría de grados API pesado.
La filial de PDVSA en Estados Unidos, Citgo, cuenta con tres refinerías (Lemont, Lake Charles y Corpus Christi), que tienen una capacidad combinada de más de 800.000 bpd y están diseñadas para procesar el crudo pesado de Venezuela.
Noticia relacionada: #Análisis | Citgo se dirige a una subasta en EEUU en pleno alivio de las sanciones a Venezuela
Lo ideal, por supuesto, sería que Venezuela volviera a producir la cifra de los 3 millones de bpd, como en el año 2000, y que volviera a exportar a EEUU los 1,3 millones de bpd que enviaba en 2001.
De momento, esta producción se sitúa en 735.000 bpd (septiembre de 2023), que se ha visto limitada por la escasez de diluyente, necesario para procesar el petróleo pesado de Venezuela.
Mientras que las exportaciones de crudo venezolano a Estados Unidos se ubican en la actualidad en 153.000 bpd (agosto 2023), lo que la convierte en el noveno proveedor de este país.
¿1 millón de bpd en 2024? he aquí las claves
La buena noticia es que el levantamiento de las sanciones permitirá aumentar las importaciones de diluyente, lo que podría impulsar ligeramente la producción. En ese sentido, la EIA espera que la mayor parte del crecimiento de la producción a corto plazo proceda de las empresas conjuntas de Chevron.
La anterior licencia de Chevron, la segunda mayor petrolera de EEUU, ha hecho que su cuota de producción se ubique hasta los 135.000 bpd en este 2023.
Con las sanciones levantadas, se espera que la producción de Chevron en Venezuela aumente hasta 200.000 bpd a finales de 2024. Es decir, unos 75.000 bpd adicionales.
Adicionalmente, las empresas operadas por Eni, Repsol y Maurel & Prom podrían aumentar la producción en 50.000 bpd adicionales a corto plazo, según IPD Latin America.
En consecuencia, la EIA estima que estas empresas podrían elevar la producción total de Venezuela a unos 900.000 bpd a finales de 2024.
Por lo tanto, para que la producción petrolera se ubique sobre la barrera del millón se requerirá de más tiempo e inversión, afirma la EIA.
En cualquier caso, las perspectivas parecen positivas para Venezuela, más aún cuando el valor del petróleo no ha hecho más que subir. Aunque, eso sí, queda por ver si el país cumple sus promesas al pie de la letra.
Lea más contenido interesante y actual:
#Dato | Las empresas petroleras «ganadoras» y «perdedoras» tras el alivio de las sanciones a Venezuela
El fueloil de Venezuela en el punto de mira del gigante global de materias primas Trafigura
Somos uno de los principales portales de noticias en Venezuela para temas bancarios, económicos, financieros y de negocios, con más de 20 años en el mercado. Hemos sido y seguiremos siendo pioneros en la creación de contenidos, análisis inéditos e informes especiales. Nos hemos convertido en una fuente de referencia en el país y avanzamos paso a paso en América Latina.