Analistas de Julius Baer creen que el precio del crudo seguirá en picada: "Los obstáculos deberían persistir"

El petróleo ha dejado su racha de aumento de precio y ha entrado en «una dinámica de caída» que se acentuó luego que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) retrasara la reunión para el próximo 30 de noviembre de 2023.

Analistas de la institución bancaria suiza Julius Baer precisaron que vaticinan que la tendencia del precio hacia la baja se mantendrá, por lo menos hasta final de este año.

«Los vientos en contra provienen de fundamentos débiles, mientras que la volatilidad proviene de la política petrolera», destacaron.

Norbert Rücker, director de economía e investigación de próxima generación en Julius Baer, acotó que prevén que «los precios bajarán en los próximos meses, ya que los obstáculos fundamentales deberían persistir», según reseñó Bolsamanía.

«Es probable que la política petrolera y los cambios de humor del mercado añadan algo de picante a esa trayectoria proyectada», sumó.

A su juicio, las principales amenazas que enfrenta el llamado «oro negro» vienen del continuo debilitamiento de los fundamentos, entre los que destacó «el almacenamiento de petróleo crudo y productos derivados del petróleo aumenta a ambos lados de las refinerías, debido al estancamiento del consumo y al aumento gradual de la producción».

«Las exportaciones de petróleo desde América del Norte se expanden, aumentando las opciones para los compradores globales y contribuyendo a una mejora de la situación general de la oferta», apuntó.

No obstante, espera que el crudo siga siendo una fuente de dramatismo en los mercados y volatilidad de los precios a medida que se avanza al año 2024.

«El ajuste de las naciones petroleras a las realidades económicas puede posponerse, pero no cancelarse», enfatizó al tiempo que añadió que este proceso «se complica aún más» por el regreso al mercado de petróleo previamente sancionado procedente de Irán y Venezuela, «debido a necesidades económicas, y por la transición energética, que eliminó los vientos de cola de crecimiento estructural del mercado petrolero».

«El desafío de las naciones petroleras a la hora de encontrar un terreno común en la política petrolera se debe a las diferentes exposiciones a los precios del petróleo. Mientras que Arabia Saudita requiere precios del petróleo en los US$ 90 para financiar su ambiciosa visión económica, la mayoría de los demás miembros verían presupuestos estables con precios en los US$ 70. Además, algunos miembros, como los Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, han invertido en capacidades de producción que les gustaría explotar en el futuro», explicó.

Igualmente, estimó que se seguirán viendo precios del petróleo más bajos hasta 2024. «Dicho esto, el sentimiento del mercado ya es bastante pesimista, lo que conlleva el riesgo de contramedidas en el corto plazo», resaltó.

¿Un nuevo recorte?

El director de mercados de Markets.com, Neil Wilson, expresó que la suspensión de la reunión de la OPEP+ «se tomó inicialmente como una señal de que Rusia y Arabia Saudita no pueden llegar a un acuerdo, pero en realidad está relacionado con la aceptación de Nigeria y Angola de una nueva línea de base que refleje sus capacidades de producción reales».

«Los inventarios de petróleo crudo en Estados Unidos han aumentado por quinta semana consecutiva, hasta el 17 de noviembre. A pesar de las predicciones de un aumento en los viajes de vacaciones para el fin de semana de Acción de Gracias, la demanda de combustible para el transporte cayó significativamente por debajo de los 9 millones de barriles por día (bpd), lo que resultó en un aumento inesperado de las existencias de gasolina», detalló.

«También se da el caso de que la OPEP no quiere que las cosas salgan mal en la reunión propiamente dicha, por lo que esto deja más tiempo para realizar evaluaciones», reiteró.

Por su parte, Stephen Innes, gestor de SPI Asset Management, puntualizó que con el aumento de la producción estadounidense y no perteneciente a la OPEP, «no debería sorprender que los productores quieran bombear más petróleo, no recortar la producción, por temor a perder incluso una pequeña porción de su participación en el mercado».

Indicó, además, que el alto el fuego en la guerra entre Israel y Hamás «da esperanzas de cierta estabilidad en la región».

«Los inventarios de petróleo crudo en Estados Unidos han aumentado por quinta semana consecutiva, hasta el 17 de noviembre. A pesar de las predicciones de un aumento en los viajes de vacaciones para el fin de semana de Acción de Gracias, la demanda de combustible para el transporte cayó significativamente por debajo de los 9 millones de barriles por día (bpd), lo que resultó en un aumento inesperado de las existencias de gasolina», detalló.