El boxeador venezolano Eldric Sella, primer deportista latinoamericano en integrar el Equipo Olímpico de Refugiados, en los Juegos de Tokio-2020, se vino a vivir a Uruguay, según contó él mismo este martes en sus redes sociales.
«Hoy tengo la bendición de empezar de nuevo en este país que sin pensarlo dos veces me abrió las puertas y me entregó la llaves para que haga de este mi nuevo hogar», escribió Sella en su cuenta de Instagram.
«Gracias Uruguay», agregó junto a una foto en la que aparece en Montevideo.
Sella, de 24 años, llegó a Uruguay procedente de Tokio, donde se convirtió en el primer latinoamericano en competir por el Equipo Olímpico de Refugiados.
Abandonó Venezuela en 2018 en medio de la fuerte crisis política, económica y de seguridad de su país y pidió asilo en Trinidad y Tobago, donde residió hasta su partida a los Juegos Olímpicos.
Pero el gobierno de la isla caribeña no le autorizó el regreso debido a que el deportista tenía vencido su pasaporte, según explicó a medios su padre, Edward Sella.
Figuras de la oposición venezolana replicaron la noticia en sus redes sociales, agradeciendo a Uruguay por brindar refugio al boxeador.
Antiguo miembro de la selección venezolana de boxeo, Sella aprovechó la invitación a un torneo en Trinidad y Tobago en 2018 para solicitar asilo.
El gobierno de Nicolás Maduro ha dicho que puede volver al país cuando quiera y no lo considera un perseguido.