Claves para autogestionar el estrés

Existen infinidad de ocasiones todos y cada uno de los días que nos hacen sentir ira y estrés. Puede que logremos dejar estos sentimientos a un lado, pero otras veces resulta imposible apartarlos del todo. La forma en la que reaccionamos a ciertas situaciones laborales, por muy frustrantes que puedan resultar, va a definir nuestra reputación e incluso nuestras carreras. Pero no solo eso, también va a afectar a tu autoestima, tu seguridad y tu salud mental. Es importante mantener la cabeza en su sitio, hablar las cosas a la cara y olvidarnos de los teléfonos móviles. Es el momento de empezar a cuidar nuestra salud mental.

Cuando tenemos que lidiar con situaciones de estrés, el miedo toma el control de nuestras mentes. El estrés se manifiesta por muchas situaciones, y las situaciones que vivimos en el trabajo son el desencadenante más feroz de todos. Si has estado torturándote en exceso últimamente, el estrés será capaz de inundarte. La forma en la que abordes las situaciones tendrá un gran peso en los resultados. Aunque pueda resultar muy complicado en el momento, ser capaces de afrontar las situaciones con calma y raciocinio traen consigo resultados cuanto menos óptimos. Si eres capaz de transformar esas charlas negativas contigo mismo en charlas positivas, conseguirás combatir las situaciones de estrés.

Sé consciente de tus cualidades

Una de las claves más importantes para combatir el estrés, es ser consciente de que eres capaz de hacerlo, aunque creas que no. Tienes que ser consciente de tus cualidades, de toda ellas. Es mucho más fácil y mucho más dañino culparte por todas aquellas cosas que haces mal, pero nunca te paras a pensar en todas aquellas que haces bien, que seguramente sean más.

No te fustigues tanto

Cada ser humano es un mundo, puede que tengas traumas de la infancia, puede que simplemente hayas interiorizado una imagen negativa de ti, pero esto no te va a hacer ningún bien. Tienes que aflojar el látigo. Todos cometemos errores, tienes que ser más compasivo contigo mismo. Es la única forma en la que vas a poder calmarte en los peores momentos. Celebra todas esas pequeñas victorias sin importar el momento.