Contrabando de hortalizas es otro obstáculo para productores del campo sin combustible

El vicepresidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro), Celso Fantinel, advirtió que en los estados andinos se ha incrementado el contrabando de hortalizas provenientes de Colombia.

Durante una entrevista para Fedecámaras Radio, Fantinel destacó que el ingreso de los alimentos representa una competencia desleal para los productores nacionales, quienes ya no están en capacidad de abastecer la demanda interna debido a factores como la escasez de combustible, fallas constantes en los servicios públicos, falta de fertilizantes y maquinaria y financiamiento bancario inexistente que han reducido al campo venezolano a los niveles de 1960.

El representante de Fedeagro manifestó que existe un déficit de 75% en la producción de todos los rubros agrícolas que consume el país, al tiempo que alertó que los productores en las fincas no perciben ni un tercio del precio que pagan los consumidores por las hortalizas en supermercados y expendios a cielo abierto.

“No podemos competir para satisfacer ese 20 o 25% del mercado interno si luego tenemos esa competencia desleal de quienes importan alimentos sin aranceles ni IVA”.

Fantinel señaló que en el oriente del país también aumentó la presencia de productos provenientes de Brasil: harinas, cereales y pastas que llegan por la frontera sur para llenar los anaqueles, en detrimento de un campo venezolano que agoniza.

– Ni una gota de combustible –

El vicepresidente de Fedeagro recalcó que en el interior del país los ciudadanos dejan de hacer colas porque tras un mes de esperar por la gasolina, el carburante no llega.

Aseguró que el sector primario no ha sido priorizado para surtirse de combustible, por lo que la única alternativa que les queda para transportar sus productos a los centros urbanos es el mercado negro.

“Para regresar a Caracas tuve que pagar el litro de gasolina a 3 dólares”

Fantinel denunció que al igual que el carburante de 91 octanos, el diésel también lleva dos semanas escaseando.

“Sin gasoil no solo está en riesgo la movilidad de la maquinaria pesada y tractores, sino el funcionamiento de los equipos necesarios para procesar cereales”, expresó.