¿Crecimiento global? Por supuesto, pero todavía sin mucha presión inflacionaria

La economía global está en su mejor momento en años y mejorará en el 2018, pero la mayoría de los economistas consultados en unas encuestas de Reuters en todo el mundo dijo que el crecimiento simultáneo no generará presiones significativas sobre los precios.

De hecho, aunque varios bancos centrales importantes se han desviado de una política monetaria ultralaxa, con algunas excepciones notables, la inflación sigue por debajo de sus objetivos y en gran medida se mantendrá así el próximo año.

“Se está convirtiendo en una tonada familiar. Otro trimestre, otra serie de revisiones al alza de nuestras previsiones de crecimiento global, otra revisión a la baja de nuestros pronósticos de inflación global”, dijo Janet Henry, economista jefe global de HSBC.

“Pero para los bancos centrales del mundo desarrollado, la tarea es cada vez más difícil. Enfrentar tanto una inflación débil como el aumento de los riesgos a la estabilidad financiera exigirá un acto de equilibrio delicado por parte de los bancos centrales y un enfoque más matizado sobre metas de inflación si se quiere mantener la expansión global”, agregó.

En sondeos de Reuters realizados entre el 3 y el 24 de octubre a más de 500 economistas de Asia, Europa y América, las previsiones de crecimiento para el 2017 y el 2018 en casi tres cuartas partes de las 48 economías consideradas se incrementaron o mantuvieron sin cambios.

El crecimiento económico global como un todo se pronostica en un 3,5 por ciento este año, estable en comparación con una encuesta publicada hace tres meses, pero un poco más bajo que el pronóstico recientemente actualizado del Fondo Monetario Internacional.

Si bien el pronóstico promedio para el 2018 se mantuvo estable en un 3,6 por ciento, la mayoría que respondió una pregunta adicional dijo que el riesgo para sus pronósticos está sesgado más al alza. Pero los encuestados recortaron sus pronósticos de inflación para el 2017 en casi dos tercios de las economías encuestadas.

Cerca del 40 por ciento de los 134 economistas que respondieron a una pregunta adicional dijo que las presiones inflacionarias mundiales no aumentarán hasta el 2019 o más allá, mientras que una cuarta parte dijo que es poco probable que reboten. El resto dijo que lo harán antes de fines del 2018.

Erik Nelson, estratega de Wells Fargo en Nueva York, dijo que para sus pronósticos de crecimiento global, que están más o menos en línea con el consenso de Reuters, un rebote más rápido que lo previsto de la inflación es el mayor riesgo.

“Si la inflación se acelera mucho más que lo esperado, ya sea en Estados Unidos u otras economías, y los bancos centrales tienen que ajustarse un poco más agresivamente de lo que pensamos actualmente, entonces probablemente haya un riesgo bajista para esos pronósticos”, explicó Nelson.