Datos | Maduro denuncia que sanciones han sido "un robo" de US$410 millones diarios en 8 años

El presidente Nicolás Maduro denunció que el «gobierno de Narnia» realizó el «robo más grande en la historia de Venezuela desde la colonización española», ya que el país ha perdido 410 millones de dólares diarios en los últimos 8 años por el «secuestro» de los activos venezolanos en el exterior, debido a las sanciones «criminales» de Estados Unidos.

«Funcionarios de Estados Unidos se hacen millonarios cobrando por hacer lobby contra Venezuela. El presidente Joe Biden debería saberlo. Hoy, el Reino Unido saca un comunicado a la vieja usanza imperial, un edicto real, donde reconoce como Asamblea Legítima la de 2015. Es risible y ridículo que se presten a la farsa. En Venezuela la que legisla, aprueba presupuestos, quien designa a las autoridades, es unica, exclusiva y determinante es la Asamblea Naciones electa en 2020, e instalada el 5 de enero de 2021. No existe otra, lo demás es Narnia, una farsa como parte de una agresión política, económica, financiera, que supimos derrotar y desmontar Ni las cenizas quedaron de la Asamblea «vendepatria» de 2015″, sentenció.

Denunció que hay una derecha extermista en América Latina, «con su odio y la intolerancia, buscan la ruptura de las reglas de juego, y puede llegar al intervencionismo extranjero». Añadió que ese sector «nació en Venezuela, porque aquí surgió la primera revolución popular del continente».

Otra etapa

Luego de haber descrito las cuatro etapas del proceso revolucionario chavista, Maduro señaló que el país está en «una cuarta etapa que es de renacimiento de la vida social, política, espiritual y económica de Venezuela».

Los efectos de las sanciones siguen siendo brutales, recalcó. «Nadie debe meterse en los asuntos internos de Venezuela, porque los resolvemos nosotros con nuestra Constitución, que decida el pueblo con su conciencia, con su voto, y que venga quien tenga venir», enfatizó el mandatario nacional.

«No queremos más sanciones, queremos libertad económica, comercial, financiera. Ya basta. Hemos aprendido a hacer muchísimo, con poquísimo. Tenemos grandes resultados, pero el impacto de las sanciones sigue siendo durísimo», explicó el mandatario.

«La cara oscura» de las sanciones

Durante su discurso de Memoria y Cuenta ante el parlamento nacional, el presidente Maduro dedicó una buena parte de la alocución a lo que calificó como «el lado oscuro» de la «guerra económica».

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En primer lugar desglosó la estructura del cuerpo de sanciones aplicadas a instituciones del país:

• 42 % de estas «medidas unilaterales» de bloqueo van contra el organismo del Gobierno.
• 18,7 % se dirigen contra la industria petrolera.
• 17 % se concentran en la economía y finanzas de la república, lo que, por ejemplo, no permiten abrir cuentas en el exterior para que el Gobierno pueda facturar sus exportaciones, especialmente las petroleras.
• 7% se dirigen contra el sector privado.

Maduro indicó que el país ha padecido «una caída brutal de la venta de petróleo desde 2015, cuando se produjo el primer decreto de Obama». El país, en consecuencia, acumula una pérdida de 232.000 millones de dólares, una cantidad que representa 99% de los ingresos que debió recibir el fisco nacional.

«Hay una persecución a toda la actividad petrolera. El objetivo es que Venezuela no tenga los recursos que libremente debe producir para invertirlos en los derechos sociales y el crecimiento de la sociedad», apuntó Nicolás Maduro.

Resistencia fianciera

«Hemos hecho un esfuerzo de resistencia financiera. La guerra no es contra Maduro, sino contra un pueblo para que no construyamos nuestro propio modelo político», añadió el presidente.

De acuerdo con los datos oficiales, hay más de 927 sanciones extorsivas, que implican «robo de activos, secuestro del patrimonio nacional, y que constituyen graves violaciones de los derechos humanos».

Esta situación ha hecho que el país haya dejado de producir una cifra acumulada de 3.925 millones de barriles, que implican la ya aludida pérdida de ingresos por 232.000 millones de dólares, «que hubiera ido a salarios, salud, infraestructura».

Además «la escasez de divisas impidió comprar insumos para mantener la actividad económica no petrolera, con un impacto de 642.000 millones dejados de producir con todo lo que implica en recuadación de impuestos, generación de empleo, e inversión social», precisó Maduro.

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