La economía argentina se contrajo 12,6% en los primeros siete meses de 2020 en comparación con el mismo periodo del año anterior, en medio de la pandemia del covid-19, informó este lunes 28 de septiembre el estatal instituto de estadísticas Indec.
En julio, la actividad económica cayó 13,2% con respecto al mismo mes del año de 2019 pero mostró una leve recuperación de 1,1 puntos porcentuales en relación a junio, de acuerdo al estimador mensual de la actividad económica (EMAE).
Los sectores más golpeados en julio, en relación con el mismo mes de 2019, fueron el de pesca (-67,1%), hoteles y restaurantes (-65,4%), servicios comunitarios, sociales y personales (-60,3%), construcción (-30,1%) y actividad inmobiliaria (-10,0%). Solo tuvieron signo positivo en la comparación interanual el sector de electricidad, gas y agua (+4,4%) y la intermediación financiera (+2,9%).
La economía argentina ha sufrido el impacto de la pandemia de la covid-19, que llevó al gobierno a decretar un confinamiento desde el 20 de marzo, aunque las medidas de aislamiento se han ido flexibilizando y modificando según las regiones y provincias.
En recesión desde 2018, Argentina tuvo el año pasado una contracción de 2,5% en el Producto Interno Bruto. En sus últimas previsiones, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estimó que la tercera economía de América Latina caerá 9,9% en 2020.
El 1 de septiembre, Argentina salió de la situación de cesación de pagos al lograr reestructurar 66.137 millones de dólares de deuda con acreedores privados bajo legislación extranjera y días después otros 41.700 millones de dólares en bonos bajo legislación local.
Tras la exitosa operación de canje de deuda, Argentina emprendió conversaciones con el FMI para reemplazar un acuerdo stand-by suscrito en 2018 por 57.000 millones de dólares, de los cuales recibió 44.000 millones hasta que al asumir en diciembre pasado el presidente Alberto Fernández renunció a los tramos pendientes del crédito.