Economía circular en Venezuela: ¿El desarrollo sostenible puede mejorar la economía del país?
La implementación de la economía circular en Venezuela puede ser una oportunidad esperanzadora para abordar los desafíos económicos que enfrenta el país.
En un escenario lleno de desafíos económicos y ambientales, se observa una oportunidad prometedora para Venezuela: la implementación de la economía circular. Esta poderosa estrategia, basada en la reutilización, el reciclaje y la reducción de residuos, ofrece una vía hacia un desarrollo sostenible y próspero. Al observar el inspirador caso de la Ciudad de Quito en Ecuador, nos preguntamos: ¿Qué pasaría si Venezuela adoptara esta visión audaz? ¿Cómo podría la economía circular transformar la forma en que se producen y consumen los recursos en el país? ¿Qué impacto tendría en la generación de empleo y en el crecimiento económico?
Imaginemos un futuro en el que Venezuela sea reconocida como un referente en economía circular, donde las empresas florezcan con prácticas sostenibles y la preservación del medio ambiente se convierta en una prioridad nacional.
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Acompáñanos en este viaje, donde exploraremos las posibilidades y desafíos que la economía circular puede ofrecer a Venezuela, y desatemos juntos el potencial de un futuro próspero y sostenible.
¿Qué es la economía circular?
La implementación de prácticas de economía circular en Venezuela puede jugar un papel crucial en el desarrollo sostenible del país, generando empleo y fomentando la preservación del medio ambiente. La economía circular se basa en el concepto de reducir, reutilizar, reciclar y regenerar, en contraposición al modelo lineal de «usar y desechar».
Según Noticias ONU: “El actual modelo económico lineal basado en “tomar-hacer-desechar” es despilfarrador, extractivista y responsable en gran medida del cambio climático y el agotamiento de los recursos”.
De igual manera, en el artículo científico “Economía Circular: Un Camino Hacia Un Quito Más Sostenible” perteneciente a INNOVA Research Journal mencionan que: “Una economía circular es un sistema industrial que es restaurativo o regenerativo por intención y diseño. Sustituye al concepto de fin de vida con restauración, cambios hacia el uso de energías renovables, elimina el uso de productos con químicos tóxicos, que perjudican la reutilización y reintegración a la biosfera, y tiene como objetivo la eliminación de desechos a través del diseño superior de materiales, productos, sistemas y modelos de negocio”.
En el contexto venezolano, la adopción de la economía circular podría tener beneficios significativos. En primer lugar, el fomento de la reutilización y el reciclaje puede contribuir a reducir la dependencia de la importación de materiales y productos, promoviendo la producción local y generando empleo en sectores como el reciclaje, la reparación y el diseño sostenible.
Además, la implementación de prácticas de economía circular puede ayudar a reducir la contaminación y minimizar los impactos ambientales negativos del país. La gestión adecuada de los residuos, la promoción de la eficiencia en el uso de recursos y la adopción de tecnologías limpias pueden contribuir a la preservación de los ecosistemas naturales y al cuidado de la biodiversidad venezolana.
Economía circular en Venezuela
La transición hacia una economía circular requiere de un enfoque integral, que involucre a los sectores público, privado y a la sociedad venezolana en general. Se necesitarán políticas públicas que fomenten la economía circular, incentivos para la adopción de prácticas sostenibles, educación ambiental y concientización para promover cambios de comportamiento.
Es por ello que personas como el artista venezolano Oscar Olivares se inspiran para crear un mural ecológico colorido con tapas de botellas y así crean conciencia sobre el reciclaje. En Instagram pueden seguir más de cerca su impresionante arte ecológico (@olivarescfc).
El mismo objetivo fue el impulso de la empresa Plastitec Group para iniciar sus funciones a finales del 2019 convirtiéndose en la empresa pionera del reciclaje de plástico de Venezuela.
La estrategia de Plastitec Group como parte de la economía circular de la empresa, se propone que todos los envases producidos regresen a la planta para volver a ser reciclados. Para ello, proponen al consumidor final y a los aliados comerciales que depositen los envases en puntos de acopio y no en la basura.
Principales países en implementar la economía circular
Según Noticias ONU: “En la actualidad, China y Europa son los líderes mundiales en la transición hacia la circularidad pues el desarrollo de sus estrategias de circularidad internas y externas influye en el resto del mundo”
Países Bajos se encuentra entre las naciones más innovadoras en materia de economía circular. Sus líderes se basan en un objetivo, tanto ambicioso como prometedor: ser un país 100% basado en la economía circular para el año 2050. Sin embargo, Finlandia se puede considerar como el país pionero en cuanto a la circularidad.
Finlandia aspira a desarrollar el mercado de economía circular más ambicioso del mundo, que fomentará las inversiones y la creación de nuevas soluciones.
Hace más de 50 años se creó por el parlamento de Finlandia el Fondo de innovación Sitra que tiene como objetivo principal el apoyo a proyectos innovadores, sostenibles y eficientes en economía circular y a su vez en fomentar la educación para así poder darle forma al futuro. Y es que el concepto de la economía circular se enseña ampliamente en las escuelas y ya hay una generación de jóvenes finlandeses que conoce bien el fenómeno.
El primer evento que puso en relieve las mejores soluciones de la economía circular, denominado Foro de Economía Circular, se celebró en Finlandia en 2017 en donde se mencionó:
“Queremos desafiar a los docentes a que enseñen economía circular a los niños de cada grado. Nuestro objetivo es que todas las personas, independientemente del sector al que pertenezcan, entiendan cómo llevar a cabo la economía circular y acabar así con la necesidad actual de tener que contar con “expertos” en dicho tema”.
Latinoamérica no se queda atrás en cuanto a la implementación de esta economía y es que Quito, Ecuador; es considerada según el varias veces galardonado Film Closing The Loop como: “Una ciudad que ofrece soluciones que van desde el reciclaje Tetrapak y el ensamblaje de automóviles sin desperdicios hasta la agricultura sostenible y el ecoturismo en los bosques nubosos tropicales”.
Chile cuenta con un Plan Nacional de Consumo y Producción Sustentables 2017-2022, que plantea: “Desarrollar, implementar y fortalecer mecanismos que permitan prevenir la generación de residuos y valorizar los residuos generados por todos los sectores de la economía, mediante la aplicación de herramientas financieras y educacionales que consideran conceptos como eco-diseño y economía circular”
Por su parte, Colombia ha formulado el 2019 una Estrategia Nacional de Economía Circular, que propone “implementar estrategias e instrumentos económicos para que los sectores productivos sean más sostenibles, innovadores y reduzcan los impactos ambientales, con un enfoque de economía circular”
De igual manera, Perú en su Plan Nacional de Competitividad y Productividad 2019-2030, plantea la adopción de métodos de producción y patrones de consumo que fomenten el tránsito hacia una economía circular”.
Principales industrias que pueden implementar la economía circular
En Venezuela, diversas industrias tienen la capacidad de implementar la economía circular, adoptando prácticas que promuevan la reutilización, el reciclaje y la reducción de residuos. Algunas de estas industrias incluyen la alimentaria y agrícola, donde se puede aplicar el compostaje de residuos orgánicos, promover la producción local y el consumo de alimentos frescos, y reducir el uso de envases desechables.
En la industria manufacturera, se puede fomentar la fabricación de productos duraderos, el uso de materiales reciclados y el diseño de productos reparables y actualizables. En el sector de la moda y textil, se pueden promover la reutilización y el reciclaje de prendas, así como el alquiler y el intercambio de ropa. En la industria de la construcción, se pueden implementar prácticas de reciclaje de materiales, utilizar materiales sostenibles y diseñar edificios eficientes en términos de energía y generación de residuos.
Además, en el sector energético y de recursos naturales, se puede fomentar la eficiencia energética, el uso de energías renovables y la gestión adecuada de los residuos. Estos ejemplos muestran cómo la economía circular puede adaptarse a diferentes industrias, siendo fundamental promover la colaboración, el intercambio de conocimientos y la implementación de políticas y regulaciones que impulsen la adopción de prácticas circulares en Venezuela.
Crecimiento y empleo implementando la economía circular
El impacto económico de la implementación de la economía circular puede variar según diversos factores, como el tamaño de la economía, el grado de adopción de prácticas circulares y las características específicas de cada país. No existe un porcentaje fijo de crecimiento económico que se pueda atribuir exclusivamente a la implementación de la economía circular.
Sin embargo, se ha demostrado que la economía circular puede generar beneficios económicos significativos a largo plazo. Al adoptar prácticas de reutilización, reciclaje y reducción de residuos, se pueden obtener ahorros en costos de materias primas, reducir la dependencia de recursos naturales finitos y minimizar los impactos ambientales.
Según Noticias ONU: “En el plano económico, el uso de acero reciclado o reutilizado para la construcción de edificios podría generar a su vez hasta un 25% de ahorro en los costes de material por tonelada de acero”.
Además, la economía circular puede generar empleo y promover la innovación en sectores relacionados con la gestión de residuos, el reciclaje, la remanufactura y la producción sostenible.
Noticias ONU menciona que: “Estudios recientes en América Latina y el Caribe también indican que la adopción de la economía circular podría crear un incremento neto de 4,8 millones de puestos de trabajo en la región.
Asimismo, según la Comisión Europea, la aplicación de unas medidas circulares ambiciosas en Europa podría generar alrededor de 700.000 nuevos empleos. Teniendo en cuenta las posibles pérdidas de puestos de trabajo derivadas de la aplicación de las tecnologías de la Industria 4.0, es necesario que la economía circular aproveche el potencial de la Cuarta Revolución Industrial al tiempo que garantiza el bienestar de los trabajadores y su participación en la economía. Para ello, es esencial que los trabajadores tengan acceso a las oportunidades de capacitación necesarias para satisfacer las demandas de empleo de un paradigma económico circular”.
En Finlandia el gobierno reconoce que las soluciones propuestas tienen un impacto significativo en el crecimiento económico. Se estima que la implementación de la economía circular podría aumentar el Producto Interno Bruto (PIB) en un 1,5% para el año 2030. Además, se proyecta que esta transición genere la creación de 75.000 empleos adicionales para ese mismo año. Estos datos resaltan el potencial positivo que la economía circular puede tener en el desarrollo económico y la generación de empleo en Finlandia.
Por otro lado, la economía circular proporciona amplias oportunidades para generar valor en el ámbito industrial al abordar las ineficiencias estructurales a lo largo de las cadenas de suministro. Un ejemplo de ello es el mercado de envases retornables, que se espera que crezca significativamente, pasando de tener un valor de 37.000 millones de dólares en 2018 a alcanzar los 59.000 millones en 2026. Además, se proyecta que el mercado de la ropa de segunda mano crecerá al doble del tamaño del mercado de la moda rápida para el año 2029.
De igual manera, se estima que la adopción de una economía circular podría generar un beneficio económico neto de 1,8 billones de euros para Europa en el año 2030. Además, en países como India, se proyecta que para el año 2050 esta transición podría generar un valor anual cercano a los 624.000 millones de dólares, en contraste con el escenario lineal actual. Estos datos resaltan el potencial económico significativo que podría derivarse de la implementación de un enfoque circular en ambos contextos.
Financiamiento del cambio
En todo el mundo, se ha observado un notable aumento en las inversiones en actividades de economía circular por parte de instituciones financieras, tanto en el sector privado como en los bancos multilaterales de desarrollo y las instituciones de financiamiento del desarrollo. Específicamente, desde 2016, el número de fondos privados vinculados a inversiones en economía circular ha experimentado un crecimiento exponencial, multiplicándose por diez. Además, solo en el año 2020, los activos gestionados en fondos de capital público relacionados con la economía circular se multiplicaron por catorce.
La financiación es esencial para el progreso de la economía circular, ya que la falta de acceso a los recursos representa un obstáculo significativo para la transición hacia este modelo económico más sostenible. Estos datos resaltan la creciente importancia que se le está otorgando a la financiación de la economía circular a nivel global, lo que refleja el reconocimiento de su potencial para generar impactos positivos tanto en términos ambientales como económicos.
Venezuela, al ser un país soberano, tiene diferentes opciones para obtener financiamiento. Aquí hay algunas entidades y organismos que podrían ayudar a financiar a Venezuela:
1.- Organizaciones internacionales: Organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) pueden ofrecer asistencia financiera y préstamos a Venezuela. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos organismos suelen requerir condiciones y reformas económicas para otorgar financiamiento.
2.- Bancos regionales de desarrollo: En América Latina, existen bancos regionales de desarrollo como el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) y el Banco del ALBA, que podrían proporcionar financiamiento a Venezuela para proyectos de desarrollo económico y social.
3.- Países aliados y acuerdos bilaterales: Venezuela podría buscar financiamiento a través de acuerdos bilaterales con otros países, especialmente aquellos que tienen relaciones políticas y económicas cercanas. Estos países podrían ofrecer préstamos, asistencia técnica o inversiones directas.
4.- Inversores extranjeros: La atracción de inversión extranjera puede ser una fuente de financiamiento para Venezuela. Para ello, el país debería crear un ambiente favorable para la inversión, mejorar la seguridad jurídica y promover proyectos atractivos para los inversores extranjeros.
Es importante destacar que el acceso a la financiación puede verse afectado por factores como la situación política, económica y social del país, así como por los niveles de confianza de los inversores y la capacidad de pago de Venezuela. Las decisiones de financiamiento también pueden estar sujetas a condiciones y negociaciones entre las partes involucradas.
Conclusión
La implementación de la economía circular en Venezuela puede ser una oportunidad esperanzadora para abordar los desafíos económicos que enfrenta el país. Adoptar esta estrategia basada en la reutilización, el reciclaje y la reducción de residuos podría conducir a un desarrollo sostenible y próspero. Inspirados por el caso exitoso de la Ciudad de Quito en Ecuador, surge la pregunta de ¿cómo la economía circular podría transformar la producción y el consumo de recursos en Venezuela? y ¿qué impacto tendría en la generación de empleo y el crecimiento económico?
Imaginemos un futuro donde maximizamos el aprovechamiento de nuestros recursos y minimizamos los desperdicios. Este enfoque nos permitiría crear un tejido empresarial sólido y diversificado, generando nuevas oportunidades de empleo en sectores como el reciclaje, la reparación y la remanufactura. Además, la economía circular fomentaría la innovación y la colaboración entre los diferentes actores económicos, impulsando la creación de empresas y startups que ofrecen soluciones sostenibles.
Este crecimiento económico basado en la economía circular no sólo fortalecería la posición de Venezuela en el mercado internacional, sino que también nos convertiría en líderes regionales en la adopción de prácticas sostenibles. Seríamos un ejemplo inspirador para otros países, generando alianzas estratégicas y atrayendo inversiones que contribuyan al desarrollo y al bienestar de nuestra sociedad.
No es tarde para caminar en esta vía y juntos podemos crear un país próspero y sostenible para las generaciones venideras. Aprovechemos esta oportunidad única de ser agentes de cambio, promoviendo un crecimiento económico que respete nuestros recursos naturales, genere empleo y mejore la calidad de vida de todos los venezolanos.
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