Un alto funcionario del gobierno de Estados Unidos dijo el miércoles que Venezuela y Cuba están detrás de la crisis en Ecuador, donde violentas protestas han puesto en jaque al presidente Lenín Moreno.
Ecuador, un país rico en petróleo pero lastrado por la deuda, se ha visto sacudido por multitudinarias manifestaciones contra los ajustes económicos pactados por el gobierno del presidente Lenín Moreno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de un multimillonario préstamo.
«Ecuador es otro problema grave», dijo el alto funcionario estadounidense a periodistas bajo condición de anonimato, cuestionando el «desorden autoritario y económico» que Moreno heredó de su predecesor y ex aliado político Rafael Correa, en el poder entre 2007 y 2017.
«Como dicen, se gastaron nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro», apuntó sobre el excedente económico del que gozó Correa.
Y agregó: «Desafortunadamente, la gente de Correa, con sus amigos en Venezuela y Cuba, está provocando manifestaciones y cierto grado de violencia allí».
El funcionario dijo que Estados Unidos está tratando de apaciguar los ánimos, subrayando la idea de que los reclamos ciudadanos se deben canalizar en el marco de la libertad de expresión y el proceso legislativo.
Pero aclaró: «Esto no significa entrar a la Asamblea Nacional y asumir el control». El martes manifestantes asaltaron brevemente la sede legislativa en Quito.
Moreno afirmó que Correa intenta derrocarlo en alianza con el mandatario venezolano Nicolás Maduro, quien se burló de la acusación diciendo que es tan insólita como decir que puede derrocar gobiernos con solo mover su bigote. Desde Bélgica, donde vive, Correa negó estar alentando el golpismo.
Pompeo y Trujillo analizan situación
La crisis en Ecuador estuvo en las conversaciones que mantuvieron en Washington el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, y el canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujillo.
«Tratamos el tema relacionado con el Ecuador. Hicimos un análisis de la situación y por supuesto que es una situación que nos interesa», dijo Trujillo en rueda de prensa.
Consultado sobre si Maduro está promoviendo la desestabilización de Ecuador, Trujillo dijo que no llegó «a ese nivel de consideración» con Pompeo.
Sin embargo, subrayó el «interés conjunto» de Washington y Bogotá de «ayudar a que la democracia sea fuerte» en Ecuador.
Trujillo recalcó que el gobierno colombiano ha estado «en constante contacto» con la administración de Moreno, a la cual Bogotá anunció la víspera su «firme respaldo» en un comunicado conjunto con Argentina, Brasil, El Salvador, Guatemala, Perú y Paraguay.
«Colombia está lista a contribuir a que el régimen democrático de Ecuador continúe fluyendo como conviene no solamente a los ecuatorianos, sino a toda la región», dijo el canciller.
Estados Unidos, aliado de Moreno, dijo el lunes que sigue de cerca los acontecimientos en Ecuador, donde manifestaciones provocaron el derrocamiento de gobernantes entre 1997 y 2005.
«Rechazamos la violencia como una forma de protesta política», dijo en Twitter el subsecretario interino de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Michael Kozak.
Estados Unidos reconoce las «difíciles decisiones que el gobierno de Ecuador ha tomado para avanzar en la buena gobernanza y para establecer las bases para un crecimiento económico sostenible», agregó.