EEUU prorroga por 90 días licencia de Chevron y empresas de servicios para seguir en Venezuela

El gobierno de Estados Unidos prorrogó la licencia que permite a la petrolera estadounidense Chevron y a las empresas de servicios Halliburton, Schlumberger Limited, Balcer Hughes -filial de GE- y Weatherford International, Public Limited Company mantener operaciones en Venezuela por 90 días más, hasta el próximo 22 de abril.

La licencia general 8E mantiene la prohibición expresa a estas corporaciones de participar en operaciones exportación e importación de diluyentes para el procesamiento de crudos pesados y extrapesados.

Las empresas de servicios incluidas en esta prórroga prestan servicios de mantenimiento para infraestructuras de perforación y de yacimientos. Chevron es socia minoritaria en la empresa mixta Petropiar en la Faja Petrolera del Orinoco.

Pocos días antes de la extensión de esta licencia, Pdvsa y la estadounidense Chevron lograron reactivar el mejorador que gestionan en conjunto para producir un crudo sintético tipo Special Hamaca Blend, que según una información de la petrolera estatal es de alta calidad y demanda internacional. La primera salida fue de 130.000 barriles diarios y se proyecta una producción de 160.000 b/d.

Ante la crisis operativa y financiera que viene padeciendo Pdvsa, esta empresa mixta había decidido no producir crudo sintético, sino un petróleo mejorado tipo Merey de 16 grados API, con el fin de focalizar la oferta en los mercados de India y China, donde este tipo de crudo tiene buena demanda.

Había pocas dudas sobre la extensión de esta licencia, ya que incluso el equipo del presidente de la Asamblea Nacional y mandatario interino reconocido por más de 50 países, Juan Guaidó, había hecho del conocimiento de la administración Trump su apoyo a la continuación de las operaciones de estas compañías estadounidenses en el país.

Funcionarios de la oposición liderados por Guaidó han indicado su apoyo para que Chevron permanezca en Venezuela, ya que ven a la corporación estadounidense como un futuro socio clave para la recuperación económica del país bajo un gobierno posterior a Maduro. Los partidarios estadounidenses de una extensión de la licencia de operación argumentan que la retirada forzada de Chevron solo abriría la puerta a una mayor participación de Rusia y China en la industria petrolera.