Eurodiputados piden acciones "urgentes" contra la crisis venezolana

Más de una decena de eurodiputados enviaron hoy una carta a la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini (en la foto), en la que alertan sobre el empeoramiento de la situación política, económica y social en Venezuela, sobre la cual solicitan y piden acciones urgentes.

La carta está firmada por 19 diputados del Parlamento Europeo (PE), entre ellos los españoles Beatriz Becerra (UPyD), Izaskun Bilbao (PNV), Javier Nart y Carolina Punset (Ciudadanos), María Teresa Giménez Barbat (del grupo liberal de la Eurocámara) y Gabriel Mato (PP).

En la misiva, los europarlamentarios señalan que, tras la resolución del PE del pasado 8 de junio, que pedía entre otras cosas la liberación de todos los presos políticos y que se permita poner en marcha el mecanismo constitucional del revocatorio, la situación en ese país «no cesa de empeorar».

«El gobierno del presidente Nicolás Maduro persiste en su actitud de bloquear la capacidad legislativa de la Asamblea Nacional (…) mediante el uso fraudulento del Poder Judicial», reza el escrito.

Respecto a los derechos humanos, los eurodiputados denuncian que ha aumentado el número de encarcelados por razones políticas, que el opositor Leopoldo López ha recibido una confirmación a su condena a casi 14 años de cárcel y que «la represión política se recrudece», así como la impunidad de la violencia en el país.

Los miembros de la Eurocámara firmantes critican también el rechazo por parte del régimen a crear un «pasillo humanitario» para paliar lo que consideran una «tremenda escasez de alimentos, así como la preocupante falta de medicamentos y material sanitario».

A la vista de esta situación, los eurodiputados han pedido a Mogherini que «insista en sus esfuerzos para cumplir con los acuerdos aprobados» en la citada resolución, que incluye el envío de una delegación al país.

Asimismo, le instan a «que lidere las acciones internacionales para la consecución de un diálogo sincero en el país», así como a «tener un papel proactivo, junto a los organismos regionales del continente americano, en la mediación de esta crisis».