#Exclusivo | Capacidad de compra de los venezolanos se desplomó 45% en agosto

El pasado 26 de agosto el dólar paralelo amaneció, según el portal Monitor Dólar Venezuela, en 9,18 bolívares y llegó a estar en 9,33 bolívares. ¡Escándalo! Se encendieron las alarmas. Se causó un gran revuelo ante lo que pintaba como el inicio de una escalada feroz del dólar «negro».

El Banco Central de Venezuela (BCV) se apresuró a inyectar una millonada en las mesas de cambio, y ya el lunes estaba ligeramente sobre los 8 bs digitales. Pero, ¿qué fue lo que realmente pasó?

José Manuel Puente es PhD en Economía por la Universidad de Oxford, profesor titular del IESA (Centro de Políticas Públicas) y profesor asociado del IE Business School de España. “Hay problemas estructurales y otros coyunturales en ese pico del paralelo. El primero de ellos es el central, en mi opinión, y es la fuerte apreciación del tipo de cambio. Venezuela salió de la hiperinflación pero sigue teniendo una de las inflaciones más altas del mundo, de modo muy dispar con sus socios comerciales. Ese anclaje cambiario ha generado una muy fuerte apreciación”, expresa como el primer problema.

Luego, hay factores coyunturales para Puente. El gobierno hizo en fecha reciente pagos de bonos vacacionales a docentes. “Y eso generó un flujo de bolívares que no fue absorbido por el ente emisor, y generó agregados monetarios, lo cual muestra que hubo un incremento importante de liquidez que se fue a la compra de dólares y produjo el incremento de fines de agosto”.

Puente relata que luego de la inyección de divisas que hizo el BCV –que ha sido la más alta de 2022- el paralelo se puso en 8,5 bolívares, pero con respecto al último mes hay 45% de devaluación, lo cual –dice- es una catástrofe.

José Manuel Puente: «El dólar no se devaluó, el problema es el bolívar que ha perdido capacidad de compra»

– Capacidad de compra disminuyó 45% –

En este mismo orden de ideas, Puente sostiene que la capacidad de compra de los venezolanos en dólares ha disminuido 45% en el último mes, lo cual implica más miseria. “El dólar no se devaluó, el problema es el bolívar que ha perdido capacidad de compra. Una de las características clave de una moneda es que sea una reserva de valor, y el bolívar ya no lo es desde hace muchos años”, fustiga el analista.

El punto es que, durante las últimas semanas, Venezuela ha visto reducir su salario mínimo por debajo de Cuba, Honduras y Haití.

-Una vez controlada la coyuntura, ¿qué vaticina usted para el dólar?

-El gobierno dice que se devaluó el dólar negro, pero el dólar oficial también se devaluó fuertemente.

-¿Qué escenarios se pueden prever?

-Por los problemas estructurales, yo veo inevitable que el tipo de cambio se siga deslizando en lo que queda de año. Si se compara nuestra situación con las de los cinco primeros socios comerciales de Venezuela, y sus inflaciones, se nota que se hace necesaria mantener depreciación nominal; es decir, bolívar-dólar.

-¿El encaje legal tiene algo que ver en esto?

-Sí, claro. El gobierno aumentó el encaje legal. Contuvo los incrementos salariales. Y hubo liquidaciones importantes de dólares por parte del BCV, lo cual es una estrategia muy costosa.

-¿Pero cuánto inyectó el BCV al saltar el paralelo sobre los 9 bolívares?

-No hay información clara, pero sabemos de modo extraoficial que el BCV trató de hacer un cambio en la política cambiaria en la liquidación de dólares, y eso causó pánico.

No se atreve a hacer proyecciones de cuánto puede cerrar el tipo de cambio al final de 2022. Por un lado está la guerra Rusia-Ucrania, que impulsa los precios del petróleo, y no se puede predecir cuál va a ser la política cambiaria del gobierno. “Los problemas estructurales siguen presentes, y por tanto estos sobresaltos van a seguir”, concluye, y apunta que sin cambio político no habrá un viraje macroeconómico que evite estas distorsiones.

Luis Arturo Bárcenas: «Aun cuando se haya salido de la hiperinflación, nadie quiere bolívares».

– Nadie quiere tener bolívares –

De su lado del tablero, Luis Arturo Bárcenas es Economista Jefe de la firma Ecoanalítica. El experto ofrece en exclusiva para Banca y Negocios su versión.

“Aun cuando se haya salido de la hiperinflación, nadie quiere bolívares. La mejor manera de defenderse es comprar comida, activos o dólares. En esa alza súbita del dólar a finales de agosto tiene que ver con pagos hechos por el gobierno, más la presión social por las protestas por incrementos salariales, que produjo un incremento de la liquidez en bolívares”, coincide con Puente.

Se produjo una descoordinación, de unos dos días, porque se generó un pago de los bancos en bolívares, sin que el BCV lo anticipase. El ente emisor prevé que cualquier incremento de la liquidez va a generar presiones cambiarias interviene, pero esta vez hubo una descoordinación, explica el analista.

“Ya para el jueves 25 hubo una intervención como de 104 millones de dólares por parte del BCV”.

El economista remarca que en el último trimestre se incrementará el consumo, el gobierno dará bonos especiales, y probablemente lo que hagan Maduro y su dream team es cortar la inyección de bolívares, pero “creo que el tipo de cambio va a seguir en alza. No tengo una estimación precisa. Pero este incremento genera inflación y, por ende, mayor empobrecimiento de la población”, asevera.

-¿Qué hace falta para normalizar esta situación?

-Por un lado, mejorar la credibilidad el BCV, con rendición de cuentas. Si queremos estabilidad no tiene sentido poner –por ejemplo- un impuesto como el IGTF.

-¿Este salto del dólar fue un asunto coyuntural que ya fue controlado?

-No. Ahora tenemos un tipo de cambio mucho más alto. Se puede estimular un poco más la dolarización, y no hablo de oficializarla.

-¿Bajar el encaje legal sería un punto a favor?

-Eso incrementaría la liquidez en bolívares. Pero el problema es que hay que tratar de acompasar el encaje para que no incida en la inflación.

No obstante, precisa que el hecho de que los depósitos salgan a la calle puede promover que la masa de dólares se incremente. “El gobierno lo que busca es mantener la inflación estable”, acota, al tiempo que remacha que “si el día de mañana el gobierno tiene que recortar de nuevo el gasto en bolívares lo va a hacer, si no ve otra opción”, remata Bárcenas.