#Exclusivo | El petróleo en la controversia entre Venezuela y Guyana: ¿Un elemento que eleva la tensión?
Es probable que en las aguas que Venezuela pudiera obtener potencialmente de la disputa con Guyana haya crudo, y se trata de crudo liviano y, en teoría, podría haber una alta productividad por pozo, por lo que sería un negocio mucho más rentable, advierte Francisco Monaldi.
El interés estratégico de Guyana no es regresar a la mesa de negociación con Venezuela para resolver el histórico reclamo por la soberanía en el territorio Esequibo. El petróleo, el «oro negro» que ha causado no pocos conflictos en el mundo contemporáneo, pasa a ser una parte sustancial del debate que, por ahora, es materia de la Corte Internacional de Justicia.
Guyana va en camino de convertirse en un actor digno de consideración en un mercado petrolero donde occidente tiene riesgos y Estados Unidos observa la evolución de la actividad petrolera del país vecino con creciente interés.
Para Venezuela, ahora el Esequibo puede ser más que un reclamo histórico al que no siempre se le dio la debida prioridad, pues ese territorio en reclamación puede albergar un interesante potencial de riqueza petrolera.
Banca y Negocios consultó a expertos para tocar este tema cuya importancia es innegable e, incluso, puede ser mayor a la que muchos venezolanos desprevenidos le atribuyen.
Francisco Monaldi es profesor-Investigador de Política Energética y Director del Programa de Latinoamérica del Instituto Baker de Políticas Públicas de la Universidad Rice en Houston. También es director fundador del Centro Internacional de Energía y Ambiente del IESA, en Caracas. Fue seleccionado como uno de los cuatro más influyentes analistas petroleros por Offshore Technology/Global Data.
“En efecto, Guyana está produciendo más de 350.000 barriles diarios de petróleo y va a terminar el año con cerca de 100.000 adicionales”, rompe el hielo el investigador de la Universidad de Rice.
Monaldi relata que va a entrar una nueva plataforma flotante, y la producción de Guyana va a seguir subiendo durante toda esta década: “se espera que supere el millón de barriles por día para 2030, y de allí en adelante puede subir significativamente”.
NOTICIA RELACIONADA: Chevron comenzará una segunda fase para incrementar la producción de crudo y recuperar lo adeudado por PDVSA
Explica que Brasil y Guyana son los únicos países de la región que están subiendo producción de crudo. Guyana, en consecuencia, puede pasar a ser un factor estratégico crucial en el mercado energético mundial, certifica Monaldi.
“Lo que hay que entender es que Starbroeke, que es un bloque que Guyana le otorgó a Exxon años atrás, llega hasta el territorio que está en disputa con Venezuela, pero la gente de Exxon no ha perforado ningún pozo en territorio de Venezuela, aunque ganáramos la disputa”, indica.
Se podría mezclar con el crudo de la Faja
Es probable que en las aguas que Venezuela pudiera obtener potencialmente de la disputa con Guyana haya crudo, y se trata de crudo liviano y, en teoría, podría haber una alta productividad por pozo, por lo que sería un negocio mucho más rentable.
Además, ese crudo tendría la ventaja de poder convertirse en un enclave muy cercano para obtener petróleo liviano que se podría mezclar con el extrapesado de la Faja del Orinoco, para obtener –por ejemplo- el Merey 16 que escasea, aporta Monaldi.
Hay un atractivo para Venezuela. «Pero si arregláramos la situación con Guyana podríamos comprar crudo al vecino, que está tratando de diversificarse con inversionistas chinos y de EEUU».
Al final, desde el punto de vista petrolífero la discusión no es tanto “on shore”, sino que Venezuela debe determinar la delimitación de las aguas.
Una vez todo resuelto –cosa que no será ni rápida ni fácil- si hay un yacimiento en la línea limítrofe los países se dividen las cuotas de forma equitativa.
Pero mientras no exista una resolución de esta disputa, ninguno de los dos países sabe dónde pueden perforar, lo más probable es que –además- haya gas. “Para mí, la salida sería que se otorgara a Venezuela la mayor parte de área marítima y se llegue a arreglos con Guyana, pero de la disputa y su naturaleza tengo muy poco conocimiento”, se deslinda.
El artículo 4 del Acuerdo de Ginebra
En su lado de la frontera, el consultor senior en negocios internacionales, Nicolás Rubio, aporta que sobre la presentación del caso ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), hay un desacuerdo importante en cuanto a la interpretación del artículo 4 del Acuerdo de Ginebra entre el Gobierno de Venezuela, por una parte, y el Gobierno de Guyana, el secretario general de la ONU y la CIJ, por la otra.
¿Cómo es esto? “Ese artículo hace mención del artículo 33 de la Carta de la ONU que incluye el arreglo judicial entre las vías para la resolución de una controversia y por esa razón el caso se encuentra hoy en día ante la CIJ. De hecho, Venezuela y Guyana tienen interpretaciones diferentes del Acuerdo de Ginebra. Para Venezuela significa que el laudo de 1899 es nulo e írrito mientras que para Guyana no lo es”, explica Rubio, con una amplia experiencia de consultoría y corporativa en desarrollo de negocios en Latinoamérica y el Caribe.
El experto se pone en los zapatos de nuestro antagonista: “Para Guyana, Venezuela debe probar lo que afirma sobre el laudo. Gracias a la explotación y exportación petrolera ya el producto interno bruto per cápita de Guyana es mayor que el de Venezuela. Esto significa que la asimetría existente a favor de Venezuela entre ambos Estados tenga una leve reducción”, apunta el vocero.
¿Y si Guyana se cuadra con Occidente?
“Recordemos que Venezuela tiene por lo menos 26 veces la población de Guyana, casi cinco veces su territorio, una economía mucho más grande a pesar de nuestra crisis socioeconómica, y fuerzas armadas mucho más numerosas. Geopolíticamente, si Guyana hace exactamente lo opuesto a lo que hizo durante la Guerra Fría, cuando era un aliado de la Unión Soviética, y se convierte en un firme aliado de los Estados Unidos y de Occidente en el área energética, y otras como la militar, en la costa atlántica de Sudamérica, la situación puede ser incrementalmente positiva para este país en el mediano y largo plazo”, enciende las alertas.
Valga precisar que Rubio es doctor y magíster en Ciencia Política (2022 y 2015, USB), especialista en Negocios Internacionales (2006, UNIMET), y tiene un MBA y un BS in Business Administration – International Business (2001 y 1999, Rochester Institute of Technology).
NOTICIA RELACIONADA: Suspensión de embargo de Citgo no afecta a cinco empresas que reclaman 56% de la deuda en disputa
El analista prosigue con su sustanciosa disertación: “Estamos en un contexto de preguerra fría donde los Estados Unidos, por un lado, y China junto a otros Estados como Rusia e Irán por el otro, están buscando aliados internacionales”, pone en contexto.
Por lo tanto, la relación del Gobierno guyanés con ExxonMobil y otras empresas petroleras occidentales puede contribuir a fortalecer esa alianza estratégica internacional. “En 2021, Estados Unidos apoyó el dictamen de la CIJ en cuanto a que esta tiene jurisdicción sobre el caso del Esequibo y abogó por la resolución pacífica de la controversia”, echa la cinta atrás.
Hay simpatía con EEUU
Y añade pólvora a un tema –de suyo- muy explosivo: “Además, ese año el Comando Sur y las fuerzas armadas guyanesas firmaron un acuerdo de cooperación. Otras muestras ejemplo de esta buena relación son el hecho que hoy se pueda volar desde Georgetown a Nueva York directamente en un par de aerolíneas estadounidenses y que, en años recientes, un hotel de una reconocida cadena de EEUU fuera construido en el malecón de la capital”.
Sin embargo, avanza el entrevistado, China también está presente en Guyana. El aeropuerto de Georgetown fue renovado y ampliado por una empresa contratista china con financiamiento del Exim Bank de China, aunque el proyecto tuvo una serie de notables inconvenientes durante su ejecución.
“La relación de negocios entre ExxonMobil y el Gobierno de Guyana es de ganar-ganar. En 2022, el Gobierno de Guyana recibió 1 millardo de dólares por ingresos petroleros. Este año se estima recibirá alrededor de 1,6 millardos”, echa números el profesor Nicolás Rubio.
Agrega que se tiene previsto que los ingresos fiscales seguirán una tendencia creciente en la década por venir, lo que permitirá al Gobierno incrementar su inversión y gasto público. “Si el Gobierno de Guyana no comete los errores que Venezuela cometió con la creación de un petroestado, estos ingresos petroleros pueden ser usados para el beneficio del país”.
“Paradójicamente, para ExxonMobil es una suerte de compensación por la confiscación de sus proyectos en Venezuela en 2007. Aquí los políticos se encargaron de destruir el negocio petrolero, el principal del país”, remata el experto.
Lea más contenido interesante y de actualidad:
Recomendaciones de Conseturismo para evitar ser estafado al comprar un boleto aéreo
#Análisis | ¿Indexar los bonos es un avance hacia la dolarización de la economía venezolana?
Somos uno de los principales portales de noticias en Venezuela para temas bancarios, económicos, financieros y de negocios, con más de 20 años en el mercado. Hemos sido y seguiremos siendo pioneros en la creación de contenidos, análisis inéditos e informes especiales. Nos hemos convertido en una fuente de referencia en el país y avanzamos paso a paso en América Latina.