FMI prevé una contracción de la economía chilena de 1,3% en 2023
El FMI destacó además la «resiliencia» y «solidez» de sector financiero y bancario y respaldó tanto el proyecto de ley de presupuestos generales para 2023 -el primero del presidente chileno, Gabriel Boric-, como una de sus principales promesas de campaña, la reforma tributaria.
La economía chilena crecerá un 2,1% este año, pero se contraerá un 1,3% en 2023, según un reporte publicado este viernes por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Tras el desplome del año que viene, el PIB chileno «retornará a una tasa de crecimiento anual potencial estimada del 2,5% a mediano plazo», apuntó el organismo, que realizó una visita al país entre el 18 y 27 de octubre y se reunió con distintas autoridades.
Para el FMI, la posibilidad de una desaceleración o recesión mundial «brusca», «shocks en los precios de las materias primas» o «una intensificación de los efectos colaterales de la guerra de Rusia en Ucrania» son los principales riesgos externos que enfrenta Chile.
Los riesgos internos, por su parte, están relacionados con «una inflación elevada que se prolongue más de lo previsto», «malestar social» o «lentitud en las reformas para satisfacer las demandas sociales».
«Si bien se espera que el proceso de reforma constitucional continúe, la incertidumbre sobre su resultado se ha aminorado», agregó.
El FMI calificó de «adecuada» la política monetaria restrictiva llevada a cabo por el Banco Central chileno para frenar la histórica inflación, que en septiembre registró un alza del 13,7% comparado con el mismo periodo del año anterior, la mayor alza en tres décadas.
El emisor chileno, explicó el comunicado, «ha respondido de forma proactiva al elevar la tasa de política monetaria a 11,25% en octubre (bastante por encima de la tasa neutral) y ha anunciado que la tasa de política monetaria permanecerá en ese nivel por el tiempo que sea necesario».
«No obstante, prevalecen los riesgos al alza para la inflación, lo cual podría hacer necesaria una prolongación del ciclo de endurecimiento si las presiones inflacionarias persisten», alertó el FMI.
El FMI destacó además la «resiliencia» y «solidez» de sector financiero y bancario y respaldó tanto el proyecto de ley de presupuestos generales para 2023 -el primero del presidente chileno, Gabriel Boric-, como una de sus principales promesas de campaña, la reforma tributaria.
«El proyecto de ley de presupuesto de 2023 se centra en el gasto social y la inversión pública de forma coherente con la sostenibilidad fiscal a mediano plazo preanunciado por las autoridades y la sostenibilidad de la deuda», indicó.
Sobre la reforma tributaria, el organismo dijo que «es de gran alcance» y «persigue objetivos valiosos, como captar ingresos para ampliar los servicios sociales, incrementar la progresividad del sistema tributario, simplificar y reducir los costos de cumplimiento, reducir los incentivos para la planificación tributaria abusiva y fomentar una economía verde».
La economía chilena cayó un 5,8% en 2020 -su mayor bajada en cuatro décadas- y se recuperó más rápido de lo previsto el año pasado, con una expansión del 11,7%.
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