Bank of America duplicó con creces su beneficio en el segundo trimestre de este año en relación con el mismo periodo de 2020, gracias en parte a la reducción de las reservas guardadas al inicio de la pandemia, pero vio cómo sus ingresos disminuían con la bajada de las tasas de interés.
El beneficio neto del banco aumentó un 173%, hasta los 9.000 millones de dólares.
El banco había reservado 4.000 millones de dólares en el segundo trimestre de 2020 para poder hacer frente a posibles impagos de clientes ante la crisis provocada por el covid-19.
En vista de la «mejora del entorno económico» a medida que se deja atrás la crisis, la empresa decidió reducirlos en 2.200 millones de dólares.
«El gasto de los consumidores está superando significativamente los niveles anteriores a la pandemia, el crecimiento de los depósitos es elevado y los niveles de préstamos han comenzado a crecer», señaló en un comunicado el consejero delegado de la entidad, Brian Moynihan.
El gasto con tarjeta de débito y crédito de los clientes minoristas aumentó un 16% con respecto al trimestre anterior.
El valor ajustado de su acción, principal referencia para Wall Street, se situó en 1,03 dólares, lo que supera los 77 centavos esperados por los analistas.
Los ingresos del banco en un año cayeron un 4%, hasta los 21.500 millones de dólares, principalmente debido a la caída de los tipos de interés, que afecta a la cantidad que gana el banco por prestar dinero.