Gobierno alemán planea reducir los precios de la electricidad a partir de enero de 2023

El ministro de Economía de Alemania, Robert Habeck, avanzó este lunes que el objetivo del Gobierno es reducir los precios de la electricidad «a más tardar» a partir de enero de 2023.

Habeck reconoció que su plan para financiar el tope de los precios de la luz a partir de los beneficios extraordinarios de las eléctricas, en lugar de a través de subsidios estatales, como en el caso del gas, es «arriesgado», según dijo en una entrevista con el diario Handelsblatt.

«Básicamente se trata de beneficios con los que los productores de energía jamás se hubieran atrevido a soñar. Es una cuestión de solidaridad que una parte de ellos vayan a servir al bien común», dijo el ministro verde, que también tiene rango de vicecanciller.

«Pero por supuesto observaremos con atención los efectos sobre las inversiones. Tomamos en serio a las voces críticas», agregó, preguntado por las consecuencias que la medida podría tener para el mercado.

Además, se mostró convencido de que los ciudadanos comprenderán la necesidad de ahorrar electricidad y gas aún cuando sean más baratos, ya que el precio seguirá siendo lo suficientemente elevado como para que sea «razonable» reducir el consumo.

Habeck calificó de «buena noticia» la caída de los precios del gas en las últimas semanas, y la atribuyó parcialmente a medidas como la regulación del mercado de los depósitos de gas, el llenado de estos por imperativo legal y los ajustes en la estrategia de compra.

Aún así, esta reducción no ha llegado todavía a los consumidores, por lo que el ministro destacó que el tope al precio de esta forma de energía sigue siendo necesario y se están estudiando la forma de introducirlo aún antes de marzo de 2023.

Según han informado los medios de comunicación alemanes, los planes del Gobierno pasan por subvencionar un determinado contingente de gas y de electricidad, entorno al 80 % del consumo habitual, en el caso de los hogares.

El viernes pasado la cámara baja del Parlamento (Bundestag) dio luz verde al proyecto del Ejecutivo para inyectar 200.000 millones de euros en créditos en un fondo extraordinario que se usará para financiar, entre otras medidas, el tope al precio del gas.