Grupo Orinoco: gobierno de Maduro no genera confianza para reestructurar Pdvsa

El Think Tank venezolano Grupo Orinoco (GO) especializado en temas energéticos y sustentabilidad ambiental, emitió un comunicado en el que expresa su pesimismo sobre una eventual reestructuración de Pdvsa, porque ningún proceso de cambio en la industria petrolera tendrá éxito si sus gestores no generan confianza y se apartan de sesgos ideológicos contra las inversiones privadas.

El grupo, que preside el ex ministro y ex presidente de la Copre, Arnoldo José Gabaldón, sostiene que se debe cumplir una serie de condiciones mínimas indispensables para que una reestructuración del sector petrolero sea viable:

– Promoción y logro de la activa participación del capital privado. El deterioro de la infraestructura, la brecha tecnológica acumulada, la deuda acumulada por Pdvsa y la escasez de recursos financieros por parte del Estado, hacen indispensable recurrir masivamente a la inversión privada nacional  e internacional, como única forma de lograr los recursos financieros indispensables.

– Deslastre de la Industria Petrolera Nacional de toda actividad no relacionada directamente con la producción de hidrocarburos.

– Revisión de los convenios internacionales y de los programas no petroleros; fijación de metas realistas y alcanzables de producción, rehabilitación  física y operativa de la industria acorde con los recursos disponibles.

– Introducción de cambios críticos de la Ley Orgánica de Hidrocarburos y  creación de un Ente independiente regulador de los hidrocarburos, para facilitar el proceso de apertura de la Industria Petrolera Nacional al capital privado nacional e internacional.

– Reformulación del proyecto de explotación de la Faja Petrolífera del Orinoco en función de sus posibilidades de mercado y recuperación de la  producción en áreas tradicionales.

– Recuperación del talento humano como aspecto esencial y restablecimiento de la cultura corporativa de seguridad, competitividad y confiabilidad  operacional en la industria.

«Recientemente el Régimen designó nuevos directivos en la Industria Petrolera Nacional y anunció extraoficialmente un programa de reestructuración de Pdvsa y de una política petrolera. Si bien, en los detalles que se han dado a conocer parcialmente, se aprecian  algunas coincidencias con los planteamientos hechos por la oposición, se está  convencido que su eventual instrumentación no arrojará resultados positivos», señala el GO.

– Razones para el pesimismo –

Las razones que la organización expone para cuestionar el plan -presunto- de reestructuración de Pdvsa que maneja la comisión reestructuradora, presidida por el ministro Tareck El Aissami, son las siguientes:

– El éxito de un programa de recuperación de la Industria Petrolera Nacional depende, en primer término, de la confianza que genere el Gobierno Nacional y los líderes del sector petrolero, para atraer las cuantiosas inversiones privadas que hacen falta; lo que no hay esperanza de que ocurra dado el inflexible modelo político definido por el Régimen, así como la falta total de confianza en el mismo dada su actuación durante los últimos 20 años

– La política de reestructurar las empresas mixtas que se propone, aumentando su capitalización por parte de los socios minoritarios no será efectiva, mientras las responsabilidades operativas y decisiones gerenciales clave permanezcan en manos de la actual Pdvsa o de otro organismo que dependa del Gobierno.

– Las reformas macroeconómicas que se enuncian para normalizar el desarrollo, no se llevaran a cabo, pues para ello deben erradicarse los sesgos ideológicos consustanciales al Régimen.

«La recuperación del sector de hidrocarburos, eje central de la economía nacional, solo será viable a través de un profundo cambio político que establezca un modelo económico apropiado y compartido por el país, que dé prioridad a la incorporación y retención de talentos, que implante un Estado de derecho de estricto
cumplimiento y que incorpore dirigentes con condiciones éticas, de capacidad y de honestidad a toda prueba», concluye el gobierno.