El presidente de Guyana, Mohamed Irfaan Ali, asegura que las reservas petroleras de su subsuelo «deben servir a las generaciones futuras» y para transformar su país en un polo regional preservando la selva virgen.
Guyana, líder mundial en reservas de petróleo per cápita, se diversificará pese a las críticas de parte de la sociedad civil, sostiene.
P: ¿Cómo utilizará el dinero y evitará la maldición del petróleo?
R: Son riquezas para las generaciones presentes y futuras. El petróleo y el gas nos brindan los recursos para construir la economía del futuro. Diversificar y establecer diferentes pilares sobre los que descansará la economía.
Hay que brindar oportunidades a la gente, abrir nuevas áreas. Los recursos petroleros nos ayudarán a catalizar muchas de las cosas que siempre hemos tenido en mente.
Queremos una economía que utilice el conocimiento, la ciencia, la innovación, la tecnología y la robótica. Servicios de salud y educación de alto nivel. Construir una nueva ciudad, una infraestructura que apoye el ecoturismo.
Buscamos ser autosuficientes en maíz y soya, abrir más tierras agrícolas. El petróleo es sólo una parte de nuestra economía. Nuestro bosque es del tamaño de Inglaterra, almacena 19,5 gigatoneladas de carbono. Su valor es de 500.000 millones de dólares. Solo en términos de créditos de carbono podemos ganar 195 millones de dólares por año.
P: Algunos activistas critican su gestión de los ingresos petroleros. Otros critican los contratos de explotación petrolera…
R: Todos los gastos deben pasar por el Parlamento. Hay un comité parlamentario de supervisión del fondo de recursos. Y también todo el sistema de seguimiento del gasto público. Aún no hemos recibido las principales fuentes de ingresos, aún no hemos comenzado a gastar. ¡Es absurdo!
¿Dónde estaban los activistas cuando Guyana sufría? ¿Cuando éramos el segundo país más pobre del hemisferio occidental? Sí, estamos de acuerdo, el contrato (de explotación petrolera) podría haber sido mejor. No lo firmamos nosotros, pero tenemos que trabajar con este contrato que existe.
Los futuros acuerdos de producción compartida serán diferentes, pero vivimos en un mundo en el que uno no puede entrar y denunciar un contrato.
P: ¿Cómo ve a su país en el futuro?
R: En 20 o 30 años veo una Guyana completamente diferente. Un país donde nuestros hijos puedan aspirar a ser los mejores del mundo. Un sistema de educación y salud que pueda competir con cualquier sistema. Una población cuyo tamaño será muy diferente al actual (800.000 habitantes).
Veo a Guyana jugando un papel importante en la historia del cambio climático. Una Guyana fuertemente impulsada por la tecnología. Un país en el que todos los habitantes vivirán una vida próspera y digna. Con un modelo de desarrollo sostenible, un país socialmente consciente del medio ambiente y con un papel en todos los problemas que afectan a la humanidad.