Irán reanuda la estrategia del "petróleo flotante" ante las sanciones de EEUU

Irán está comenzando a almacenar petróleo en su flota de superpetroleros otra vez. Las inminentes sanciones de Estados Unidos obligarán al país del golfo Pérsico a revivir una estrategia que desplegó bajo las sanciones anteriores y que permitieron a Teherán sacar grandes cantidades de crudo al mercado tras el fin de las sanciones en 2016.

La acumulación de crudo flotante frente a las costas de Irán es señal de la efectividad de las nuevas sanciones impuestas por el presidente estadounidense, Donald Trump, al petróleo del país del golfo Pérsico. Las medidas deben entrar en vigor a principios de noviembre, pero compradores como Francia, Corea del Sur y otros ya han comenzado a recortar drásticamente sus compras.

Este hecho puede haber impulsado en parte los precios del crudo en los últimos meses. Sin ir más lejos, esta misma semana el petróleo de tipo Brent ha alcanzado los 80 dólares otra vez.

Irán produce pero no vende

Irán sigue produciendo prácticamente la misma cantidad de petróleo, pero no logra colocarlo en el mercado ante la falta de apetito de los países occidentales, que está cediendo ante las amenazas de Donald Trump, que ya lanzó un aviso a los países que se atrevieran a importar ciertos bienes de Irán tras la aprobación de las sanciones.

«Podemos esperar que el almacenamiento flotante aumente bajo el creciente impacto de las sanciones de Estados Unidos en los próximos meses», asegura desde Londres Harry Tchilinguirian, jefe de estrategia de mercados de materias primas de BNP Paribas.

Hasta ahora, la mayoría de los barcos en cuestión, todos de propiedad iraní, solo han estado reteniendo crudo en el mar durante algunos días o semanas, en lugar de meses o años, como lo hicieron durante las sanciones de 2012-2016, según muestra el seguimiento de petroleros recopilado por Bloomberg. Casi todos los principales clientes de Irán han reducido las compras barriles iraníes en agosto comparado con abril.

Al menos cinco tanques llenos de crudo han fondeado frente a la costa iraní en las últimas dos semanas y media. Dos buques contienen petróleo condensado y otro petróleo ligero producido en los campos de gas natural de Irán, han permanecido inactivos durante semanas en las costas.

Trump pretende recortar las exportaciones de petróleo de Irán para frenar los ingresos al tercer miembro más grande de la Organización de Países Exportadores de Petróleo. En mayo, se retiró del pacto alcanzado en 2015 que flexibilizó las sanciones a cambio de que Irán desacelerara su programa nuclear.

Como se puede observar en el gráfico, tras el acuerdo de 2015 el precio del petróleo se hundió con fuerza en los próximos meses por varios factores relacionados con la oferta. Entre estos factores pudo ser fundamental la mayor participación de Irán, que sacó al mercado el petróleo que había acumulado en sus buques durante años de sanción.

Trump describió el acuerdo como «podrido» y señaló que Irán no supo defenderse de las pruebas sobre la tenencia de misiles balísticos del país ni de la financiación de grupos terroristas. Los compradores que desafíen las sanciones de Estados Unidos corren el riesgo de que sus bancos y empresas queden fuerza de la órbita de la primera economía del mundo.

El país de Oriente Medio no está almacenando tanto crudo en el mar como lo hizo durante las sanciones anteriores, cuando decenas de millones de barriles se mantuvieron almacenados durante meses. Las exportaciones tampoco han caído tanto, por ahora. Aun así, la acumulación crudo flotante pone de relieve los desafíos a los que se enfrenta el país para encontrar compradores: clientes como Corea del Sur han detenido por completo las importaciones desde el país, mientras que las refinerías de Europa están disminuyendo sus pedidos.

Irán extrajo alrededor de 3.7 millones de barriles por día desde que se redujeron las sanciones a principios de 2016, alrededor de 1.1 millón de barriles más por día de lo que estaba produciendo cuando las sanciones estaban vigentes.

Los petroleros que se usan para almacenar son propiedad de la estatal National Iranian Tanker. Las autoridades del país deberán hacer el uso más eficiente posible de los tanques de almacenamiento terrestre y por mar para acumular todo el petróleo posible a la espera de que algún día se levanten las sanciones.

«Las exportaciones iraníes están cayendo rápidamente», sostiene Amrita Sen, analista petrolera jefe de Energy Aspects, en una nota a clientes. Los envíos están «preparados para alcanzar un promedio de 1.5 millones de barriles por día en septiembre según el programa de carga preliminar, en comparación con los cerca de 2.8 millones de barriles por día de exportaciones de petróleo en abril y mayo», explica.