JPMorgan Chase lanza un nuevo banco comercial digital en el Reino Unido

JPMorgan Chase ha anunciado que planea abrir en los próximos meses una nueva entidad de banca comercial digital en el Reino Unido que operará a través de una aplicación móvil.

La subsidiaria británica, para la que ya se han creado más de 400 puestos de trabajo, operará bajo la marca Chase, tendrá su sede central en Londres y otra oficina en Edimburgo, indicó la firma en un comunicado.

«Traemos Chase al Reino Unido porque queremos ofrecer a los clientes una nueva opción que les permita beneficiarse de una experiencia bancaria simple y excepcional, construida a partir de las notables capacidades de JPMorgan Chase», afirmó el consejero delegado para Banca de Consumidores y Comunidades de la entidad, Gordon Smith.

«El Reino Unido cuenta con un mercado bancario vibrante y altamente competitivo, y por eso hemos diseñado este banco desde cero, para cumplir con las necesidades de los consumidores locales», agregó el directivo de JPMorgan, uno de los mayores bancos comerciales en Estados Unidos, con 55 millones de clientes digitales activos.

Sanoke Viswanathan, antiguo responsable de la Oficina Administrativa y ex Jefe de Estrategia de la rama corporativa de JPMorgan, tomará las riendas como consejero delegado de la nueva firma británica.

La compañía subrayó que JPMorgan Chase cuenta con una subsidiaria con licencia para operar en el Reino Unido y sus operaciones estarán supervisadas por los reguladores británicos.

Chase ofrecerá un «amplio rango de productos» a sus clientes del Reino Unido, si bien su cartera final de servicios está todavía sujeta a «una fase de pruebas internas».

El banco contará con «un centro de atención al cliente establecido en el Reino Unido» que proveerá «acceso rápido y personalizado las veinticuatro horas».

Aunque el mercado de la banca digital cuenta ya con muchos actores en las islas británicas, JPMorgan subraya que antes de tomar su decisión «ha llevado a cabo una amplia investigación para identificar dónde puede tener impacto entre los consumidores».

Su análisis destaca que «la estabilidad y la imagen de confianza del proveedor bancario continúa siendo una de las consideraciones clave» por parte de los clientes británicos.