Mercados bursátiles se derrumbaron este #5Ago y arrastraron en la caída a los precios petroleros
El índice Dow Jones, en su peor jornada desde 2022, cedió 2,60% a 38.703,27 puntos, mientras el crudo WTI perdió por su parte 0,78% a 72,94 dólares. Un lunes negro en toda regla en los principales mercados.
La bolsa de Nueva York se derrumbó este lunes 5 de agosto en medio de un movimiento de pánico que golpeó a los mercados mundiales ante temores de recesión en Estados Unidos y la apreciación del yen.
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El índice Dow Jones, en su peor jornada desde 2022, cedió 2,60% a 38.703,27 puntos. El tecnológico Nasdaq, en mínimos desde mayo, perdió 3,43% a 16.200,08 unidades, en tanto el S&P 500 retrocedió 3% a 5,186,33 puntos.
Los 30 valores que integran el Dow Jones terminaron en rojo y los 11 sectores del SP 500 también.
El índice VIX, conocido como «el índice del miedo» porque mide la volatilidad del mercado, subió durante la jornada a un máximo desde marzo de 2020, cuando se declaraba la epidemia de Covid-19.
La debilidad del mercado laboral en julio en Estados Unidos «señala que la Fed (la Reserva Federal, el banco central estadounidense) esperó demasiado para bajar sus tasas» de interés, estimó Pantheon Macroeconomics.
Esta firma destacó que el dato de empleo publicado el viernes, principal detonante de la ola de ventas, se conoció dos días después de que la entidad decidiera mantener sin cambios sus tasas de interés de referencia.
La Fed mantiene en niveles inéditos en más de dos décadas sus tasas de interés, entre 5,25% y 5,50%. Las subió para enfriar la economía ante una elevada inflación. Tasas de interés altas encarecen el crédito y desalientan el consumo y la inversión, reduciendo así presiones sobre los precios.
Para muestra, un botón: Nvidia, estrella de Wall Street desde el despegue de los valores del sector de la inteligencia artificial, cayó 6,36% a 100,45 dólares por acción.
Caída global
Los principales mercados mundiales se desplomaron este lunes.
Las bolsas europeas terminaron con fuertes caídas. París perdió 1,42%, Londres 2,04%, Fráncfort 1,82%, Madrid 2,34% y Milán 2,27%.
En las bolsas asiáticas, la caída de los índices fue mucho más acusada.
Tokio se desplomó. El Nikkei 225, su principal índice, que ya había caído un 5,8% el viernes, perdió un 12,4%, o 4.451,28 puntos, el lunes para cerrar en 31.458,42 unidades batiendo su récord de pérdidas, que se remontaba al desplome bursátil de octubre de 1987.
Taiwán cayó más de 8% y Seúl más del 9%. Las bolsas chinas cayeron más moderadamente: el índice Hang Seng de Hong Kong cedió 2,13% en las últimas operaciones. El índice compuesto de Shanghái cayó 1,54% y el de Shenzhen 1,85%.
En el mercado de bonos, las tasas de los papeles de deuda de Estados Unidos estaban en mínimos en más de un año (3,77% para los bonos a 10 años hacia las 20H20 GMT), reflejo de una alta demanda de estos títulos considerados seguros.
«Detonante»
«El detonante: un informe sobre el empleo en Estados Unidos», que hizo caer «las acciones y los rendimientos de los bonos» en Wall Street, explicó Stephen Innes, analista de SPI Asset Management.
La tasa de desempleo estadounidense subió en julio más de lo previsto, hasta el 4,3%. Es la tasa de paro más alta en el país desde octubre de 2021.
El viernes, tras la publicación de los datos de empleo, el Nasdaq entró en zona de corrección con una caída de 2,43% a 16.776,16 puntos. Una corrección implica una pérdida de 10% desde el pico más reciente.
Otros factores detrás de la volatilidad incluyen la anticipación de una posible retaliación iraní tras la muerte de miembros de alto perfil de los grupos islasmistas Hamás y Hezbolá, atribuidas a, o asumidas por, Israel.
Para Peter Cardillo, de la consultora Spartan Capital, la debacle bursátil se debe a «una combinación de factores, entre el temor a una desaceleración de la economía estadounidense y la desactivación del carry-trade» en yenes de los fondos especulativos.
Estos fondos dejan de utilizar este mecanismo, que consiste en tomar crédito en yenes a tasa baja para invertir en activos de riesgo como las acciones del Nasdaq.
Ahora que el yen se fortalece y que el banco central japonés (BoJ) abrió la puerta a más subidas de tasas, «el dinero sale del mercado accionario, en particular en Japón», destacó Cardillo luego de la caída de más de 12% del Nikkei este lunes.
A pesar de los temores de recesión en la mayor economía mundial, CFRA Research «continúa prediciendo un ‘aterrizaje suave'» de la economía, esto es, una desaceleración con caída de la inflación, sin recesión, señaló en una nota su jefe de estrategia de inversiones, Sam Stovall, quien indicó que agosto es históricamente un período de debilidad para las acciones.
Cardillo, incluso, hizo notar que «los datos de creación de empleo (en Estados Unidos) siguen siendo positivos».
Precios petroleros arrastrados a la baja
Los precios del petróleo, que cayeron en la apertura a mínimos en seis meses por temores de recesión en Estados Unidos y en China, moderaron sus pérdidas al cierre del lunes.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en septiembre cedió 0,66% a 76,30 dólares, luego de tocar un mínimo desde enero.
El West Texas Intermediate (WTI) para igual entrega perdió por su parte 0,78% a 72,94 dólares, poco después de irse a mínimos en seis meses.
«Los temores de una destrucción de la demanda» mundial de petróleo «se intensifican», y pesan sobre los precios del crudo en un contexto de aversión al riesgo, resumió Tamas Varga, analista de PVM Energy.
Estos temores tienen más peso en el mercado que «los riesgos de suministro ligados a la subida de tensiones geopolíticas en Medio Oriente», afirmó John Plassard, especialista de inversiones en Mirabaud.
Datos del empleo en Estados Unidos para julio, publicados el viernes, mostraron que el ritmo de creación de puestos de trabajo en Estados Unidos cayó, en tanto el desempleo aumentó.
Estas cifras se agregaron «a la debilidad de los datos de la industria manufacturera» en julio, añadió Plassard.
Así, «se reactivaron los temores sobre una recesión» en la mayor economía mundial, resumieron los analistas de DNB.
A su vez, la industria manufacturera en China tuvo una contracción de actividad en julio, cayendo de 51,8 puntos en su escala en junio a 49,8 puntos. Cualquier valor por debajo de 50 indica contracción de actividad, en este caso, la primera desde octubre de 2023 para el índice PMI Caixin chino.
La salud de la economía de China, el mayor importador mundial de crudo preocupaba a los inversores desde que su crecimiento se estancó en el segundo trimestre.
El gigante asiático se encamina hacia una crisis sin precedentes de su vasto sector inmobiliario, aunado a un consumo que sigue debilitado y una tasa de desempleo alta entre los jóvenes.
En la segunda mitad de la jornada, el mercado recibió con agrado el dato de actividad en el sector servicios de Estados Unidos, que registró una recuperación en julio, incluso por encima de lo esperado, según la encuesta publicada el lunes por la federación profesional ISM.
El índice que mide esta actividad se ubicó en 51,4% en su medición de julio frente al 48,8% constatado en junio. El dato indica una expansión.
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