OFAC: Raúl Gorrín le compró regalos a Cilia Flores

La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) asegura que el empresario venezolano Raúl Gorrín compró regalos a la hoy primera dama y constituyente, Cilia Flores, así como a otros funcionarios chavistas como parte de sus estrategias para vincularse con el poder y sacar provecho económico.

Gorrín fue sancionado por Estados Unidos a través de la OFAC por ser parte de una red de intercambio ilícito de divisas en el que también se vincula a su esposa, socios y a la extesorera Patricia Díaz.

Los estadounidenses señalan que Gorrín pagó sobornos a Díaz mientras esta estaba al frente de la Oficina Nacional del Tesoro venezolano (2011-2013), para que su casa de bolsa (Interbusa, empresa de la que es directivo) fuera una de las «seleccionadas por el gobierno», sin especificar para qué tipo de actividad económica. El empresario también pagó sobornos al esposo de Díaz, José Velásquez, otro de los sancionados en la más reciente tanda de medidas del gobierno de Donald Trump.

Gorrín es prófugo de la justicia estadounidense acusado de pagar $1.000 millones a otro extesorero venezolano, Alejandro Andrade, quien admitió haber recibido los sobornos y fue condenado a 10 años de prisión.

El empresario «mantuvo y compró activos para Díaz y Velásquez de la misma manera que lo hizo para Andrade, incluyendo propiedades en Cap Cana, República Dominicana, aeronaves y yates, maquillando la propiedad de estos activos a través de otra persona para ocultar la propiedad final de Díaz y Velásquez», indica la OFAC.

Las autoridades estadounidenses presumen que Gorrín, dueño del  canal Globivisión y de Seguros La Vitalicia en Venezuela,  «también pagó a varios funcionarios para tener acceso a políticos venezolanos y altos cargos gubernamentales, y se cree que tenía fondos en nombre de personas como Elvis Amoroso (actual Contralor General de la República) y Maikel José Moreno Pérez (presidente del Tribunal Supremo de Justicia), un amigo cercano de Gorrín.»

«Gorrín también compró regalos para Cilia Adela Flores de Maduro, la primera dama de Venezuela», agrega la OFAC, sin aportar más detalles.

Otro de los sancionados por EEUU es Leonardo González Dellán, a quien señalan como el testaferro de Alejandro Andrade y otros funcionarios venezolanos (no se precisó quiénes). Tiene su residencia en Inglaterra y escribe en el sitio web New Europe, donde su perfil lo describe como empresario, emprendedor y filántropo.

González fue presidente del Banco Industrial de Venezuela (BIV) entre 2002 y 2004 y en 2007 inauguró en Caracas el exclusivo restaurante Alto. En 2016 apareció como uno de los venezolanos mencionados en los Panamá Papers.