13/12/2024 10:09 AM
| Por Alejandro Ramírez Morón (Exclusivo para Banca y Negocios)

#Perspectiva2025: ¿Máxima presión o pragmatismo? Las sanciones definen escenarios petroleros

Frente a la realidad política venezolana, la producción petrolera en 2025 apunta a dos escenarios básicos: una caída progresiva de la producción o un aumento limitado por la falta de inversión y el estado de las infraestructuras dicen expertos consultados por Banca y Negocios.

#Perspectiva2025: ¿Máxima presión o pragmatismo? Las sanciones definen escenarios petroleros

Ya se acerca el año 2025. Un año que pinta complejo. ¿Qué pasará en 2025 con nuestra industria petrolera? Antes de entrar en los escenarios, hay que decir que 2024 ha sido un año difícil, pero la producción de crudo ha marcado una tendencia de relativa recuperación.

Por supuesto, no se logró -y a estas alturas se puede dar por hecho- alcanzar una producción sostenida de 1.000.000 de barriles por día; pero hay una recuperación evidente, determinada en buena medida por la actividad de las empresas extranjeras que se sustenta en la flexibilización de las sanciones aplicadas por Estados Unidos.

De acuerdo con la data oficial, Venezuela reporta una producción que se ubica en un promedio de 960.000 barriles por día. Si se miran las cifras de fuentes directas de la OPEP, el volumen baja a una media de 895.000 barriles.

La actividad petrolera, aunque muy reducida frente a sus máximos históricos superiores a 3.708.000 barriles por día registrados en 1970, se ha recuperado y gracias a que no aplican las sanciones que impiden exportar petróleo, el aporte fiscal ha crecido sustancialmente.

Sin embargo, los escenarios para 2025 lucen complicados, porque la industria petrolera puede regresar a una situación de bloqueo o no.

Con el triunfo del expresidente Donald Trump y ante el hecho de que las elecciones del pasado 28 de julio generaron polémica y no una normalización de las relaciones internacionales del país, como se esperaba, ahora, de cara a 2025, el escenario petrolero está teñido de incertidumbre.

#Perspectiva2025: ¿Máxima presión o pragmatismo? Las sanciones definen escenarios petroleros

El escenario de «máxima presión» aplicado eventualmente por Donald Trump «reduciría progresivamente la producción a 500.000 barriles diarios para 2029», dice Alberto Cisneros de Global Business Consultants.

El doctor Alberto Cisneros es CEO y presidente de Global Business Consultants, una firma que asesora a empresas petroleras –desde hace dos décadas- en buena parte de América Latina.

“No hay equipos exploratorios para nueva producción”, esboza Cisneros –de entrada- una cruda realidad. Dice que la actividad de exploración está estancada, por una situación financiera muy comprometida de PDVSA.

Aunque no hay data precisa procedente de la petrolera estatal, la OPEP viene reportando sostenidamente entre 2 y 3 plataformas de perforación activas, cuando una recuperación de la actividad reclama un nivel mínimo de 50 «taladros» en un entorno de producción creciente.

Los pocos «taladros» que operan –dice Cisneros- son de workover para recuperar la producción de pozos secundarios y terciarios. “En consecuencia, el país no va a tener una incorporación de reservas, por lo cual no habrá aliento para una recuperación de la producción”, cincela sus ideas.

En Maracaibo, Barina y Apure –relata- hay yacimientos muy antiguos que se están tratando de recuperar para obtener algo más de crudo en un procedimiento que, se estima, podría aportar niveles de producción relativamente bajos.

Producción: varias fuentes

¿Pero qué pasa con la producción? Hay divergencias –coloca su declaración- entre las fuentes oficiales, las secundarias y las que su consultora Global Business Consultants obtiene.

Cisneros indica que la explosión acaecida a principios de noviembre –en el complejo gasífero de Muscar- en el estado Monagas ha mermado la producción. El gobierno ha reportado, no obstante, que esta instalación ya tiene un 80% de recuperación.

“A nivel oficial todavía no hay un informe, pero las fuentes secundarias dicen que esa explosión hizo que la producción de crudo cayera 150.000 barriles diarios, para ubicarse en 750.000 barriles. Nuestra consultora registra una caída de 140.000 barriles por día, que nos lleva de 880.000 barriles diarios en octubre a 740.000 en noviembre”, explica conciso Alberto Cisneros.

Cisneros pone la mira en el futuro: su empresa –expone- parte de la base de que, con Donald Trump como nuevo inquilino en la Casa Blanca, más allá del «toma y daca» político venezolano que todos ya conocemos, los escenarios que se abren son complicados.

El analista va más allá y roza un filo peligroso: Cisneros recuerda que el Congreso de Estados Unidos aprobó el 18 de noviembre la “Ley de Prohibición de Operaciones y Arrendamientos con el Régimen Autoritario Ilegítimo de Venezuela” (H.B. 825), la cual busca ser un obstáculo para las operaciones comerciales con personas (naturales o jurídicas) que apoyen al gobierno de Nicolás Maduro.

Tres escenarios

Global Business Consultants maneja tres escenarios: mantenimiento del status quo (lo cual sería para la industria petrolera un problema serio, opina Cisneros); apertura democrática (escenario claramente positivo); y un escenario mixto, en el cual se tome una vía media.

Hay dos escenarios desde la perspectiva de la presidencia de Trump: el primero es que «todas las sanciones se reinstalan en un momento y pechan a quien sanciona, pues los sancionados toman los caminos verdes”, declara. Es el caso de Cuba.

Si se produce este escenario es porque Trump cierra las puertas de la OFAC, y se abre cada seis meses para revisar Chevron. Este escenario, el más extremo posible, reduciría progresivamente la producción a 500.000 barriles diarios para 2029.

Este es un escenario, pero si Venezuela esquiva las sanciones (como Irán) y hay una continuidad “donde las sanciones estarían con la puerta cerrada pero la ventana abierta como están ahora, para 2027 la producción podría estar en 950.000 barriles por día”, estima conservadoramente Cisneros.

En el escenario de continuidad, avanza Cisneros, para marzo de 2025 la producción podría colocarse en 800.000 barriles diarios, mientras que las exportaciones se ubicarían–dice el experto- en 500.000 barriles diarios.

PDVSA puede verse beneficiada por alivio de sanciones en negociaciones entre Venezuela y EEUU.

La visión más optimista: Venezuela podría llegar el año próximo, en el segundo semestre del año, si todo marcha bien, a una producción promedio de entre 1.000.000 y 1.100.000 barriles diarios.

Otra visión

Otros expertos apuntan una visión diferente, porque no ven tan sencilla una reimposición de sanciones a Venezuela en un contexto en el cual el mercado petrolero puede verse afectado por conflictos de diverso tipo en el Medio Oriente, sobre todo, aparte de nuevas tensiones comerciales, producto de la política de fijación de aranceles que ha prometido el presidente Trump.

Si se producen tensiones fuertes en el escenario comercial, habrá desajustes y posiblemente se eleve la inflación a escala internacional, por lo que Estados Unidos presionaría por menores precios petroleros y mayores suministros.

En todo caso, aunque en el mapa aparecen productores eficientes como Guyana o Trinidad que pueden ser opciones de complementación accesible para alcanzar una mayor oferta de crudo, Venezuela sigue siendo un competidor de alto potencial.

El gran rival geopolítico para la administración Trump es China, por lo que lanzar a Venezuela a los brazos del gigante asiático por la reedición de la política de «máxima presión», podría no ser la primera opción de la nueva administración estadounidense.

Por lo tanto, para los expertos que defienden estas tesis, Trump tendrá una política hacia Venezuela que será determinada por el pragmatismo, al menos durante la primera fase de su gobierno, aunque su discurso será duro y posiblemente se produzca una batería de sanciones a personas vinculadas al Estado venezolano.

En este contexto, Venezuela podría llegar el año próximo, en el segundo semestre del año, si todo marcha bien, a una producción promedio de entre 1.000.000 y 1.100.000 barriles diarios en un escenario optimista.

Obviamente, para alcanzar una producción de este nivel en el corto plazo no basta solo con mantener las licencias a las petroleras extranjeras y las que permiten que se puedan hacer transacciones con el petróleo venezolano, como exportar a Estados Unidos y Europa.

Sin duda, es necesaria una amplia reforma petrolera que suponga cambios de regulación, faciliten formalmente la entrada de capitales privados y se creen condiciones financieras adecuadas.

El juego de las licencias

Por su parte, Francisco Monaldi es Profesor-Investigador de Política Energética y director del Programa de Latinoamérica del Instituto Baker de Políticas Públicas de la Universidad Rice en Houston (EEUU). También es director Fundador del Centro Internacional de Energía y Ambiente del IESA, en Caracas.

La producción de crudo en Venezuela –asevera Monaldi- se ubica en 876.000 barriles por día, según fuentes secundarias, y para el gobierno en 960.000. Esta es la última cifra oficial, “pero la explosión en Monagas afectó mucho la producción y los próximos reportes reflejarán una extracción menor”, advierte.

“Hay dos escenarios: se mantienen las licencias, o se retiran las licencias. En estos momentos hay dudas sobre qué pueda hacer el presidente Trump. La presencia de Marco Rubio –se dice- en el gabinete del nuevo gobierno estadounidense, como jefe de la diplomacia, representa una opción de «mano dura». Pero hay otra versión que habla de negociación, pragmatismo”.

Si se mantienen las licencias, expone Monaldi, la producción seguirá subiendo, fundamentalmente en dos proyectos: Chevron, “a la que no le queda mucho crudo adicional por extraer, y ya su gerencia había estimado una producción de entre 250.000 y 260.000 barriles diarios”, apunta el experto.

Le sigue Repsol –cuenta el analista- que podría aportar 40.000 barriles por día. Y Maurel & Prom “que es una operación más pequeña donde estamos hablando de entre 15 y 20.000 barriles diarios”, pone las cosas en claro. Entre estas dos operadoras podrían aumentar su volumen de crudo a unos 100.000 barriles diarios.

¿Y si se retiran las licencias? “La producción inmediatamente caería un poco, porque los diluyentes que se viene importando desde Estados Unidos y la India podrían dejar de importarse”, da un paso al frente.

Según Monaldi, también puede ser que se vea afectada la producción del campo Boscán, operado por Chevron. La producción, según el académico, puede caer hasta 100.000 barriles diarios en promedio en una reedición del escenario de «máxima presión».

“Lo más probable es que nuestra economía entre en recesión”, endurece la faz.

#Perspectiva2025: ¿Máxima presión o pragmatismo? Las sanciones definen escenarios petroleros

Pareciera que Venezuela no es una prioridad, pero puede ser que Trump sea más pragmático porque no puede presionar a la vez a Venezuela y a Irán: Francisco Monaldi, experto petrolero.

La refinación

Francisco Monaldi –en otras arenas- dice que la capacidad de refinación de Venezuela es limitada, pero no tanto como llegó a estar en los años de bloqueo total.

Sin embargo, Venezuela está importando gasolina, y –si no se mantienen las licencias- se puede llegar a un punto de escasez, porque se tendría que volver a comprar combustible a Irán.

Monaldi recalca que “existe una oportunidad muy importante en el área gasífera, y podría darse una política diferenciada de sanciones para crudo y gas”.

En este momento se están exportando unos 250.000 barriles de petróleo a Estados Unidos, informa el vocero.

“Trump ha amenazado con aranceles a los crudos mexicano y canadiense, pero puede que eso nunca pase”, afirma Monaldi.

Pareciera que Venezuela no es una prioridad, avanza el profesor, pero puede ser que Trump sea más pragmático porque no puede presionar a la vez a Venezuela y a Irán.

Es verdad que el actual presidente Joe Biden ha mantenido conversaciones con el gobierno de Maduro, y el río suena como para traer estas piedras: es posible que Trump mantenga por pragmatismo esa política.

Monaldi gira su declaración hacia los precios del petróleo.

Indica que se han mantenido sobre los 70 dólares por barril y la OPEP no va a poder deshacer el recorte –porque no hay suficiente demanda-, lo que hará que bajen los precios en 2025.

“Se han producido picos por los ataques de Israel al Líbano y Gaza”, sostiene. “Hay una presión a la baja de los precios para 2025”, es claro.

“Es probable que incremente de manera relevante el volumen de crudo no OPEP, con competidores en ascenso, como Brasil, Guyana, Estados Unidos, Canadá, y la demanda no está subiendo tan rápido como la oferta», pone el mercado en perspectiva.

«Estados Unidos está en máximos históricos de producción, aunque no se espera que en 2025 su extracción aumente considerablemente, pero Brasil y Guyana van a seguir subiendo, sin duda”, pone el punto final Francisco Monaldi.

Lea más contenido interesante y de actualidad:

Banca y Negocios Somos uno de los principales portales de noticias en Venezuela para temas bancarios, económicos, financieros y de negocios, con más de 20 años en el mercado. Hemos sido y seguiremos siendo pioneros en la creación de contenidos, análisis inéditos e informes especiales. Nos hemos convertido en una fuente de referencia en el país y avanzamos paso a paso en América Latina.

Síguenos en nuestro Telegram, Instagram, Twitter y Facebook

Comparte este artículo