Petrobras impuso récord de exportaciones cuando Brasil está azotado por la pandemia

La petrolera brasileña Petrobras exportó en mayo un récord de 1,11 millones de toneladas de crudo, volumen en un 231 % superior el del mismo mes de 2019, pese a la crisis que vive el sector por el exceso de oferta, que derribó los precios, y la retracción del consumo por la pandemia de COVID-19.

La mayor empresa de Brasil destacó en un comunicado este viernes que el volumen de petróleo exportado en mayo fue en un 10 % superior al de febrero, que constituía su récord y antes de que la pandemia provocara una paralización de actividades en todo el mundo.

«El récord de exportaciones se produjo en un período desafiante de la economía mundial con reducción de la demanda global por petróleo y derivados ocasionada por la pandemia de COVID-19», dijo la empresa en el comunicado.

De acuerdo con Petrobras, su «estrategia de diversificación de los destinos de las exportaciones de crudo se ha mostrado eficaz en la captura de una mayor participación en el mercado externo».

El aumento de las ventas externas se produjo tras el acuerdo que realizaron los miembros de la OPEP, organización de la que Brasil no es miembro, para reducir su producción y adecuarla a la caída de la demanda mundial.

La compañía agregó que consiguió elevar su participación en el mercado mundial gracias en parte a la entrada en vigor en enero de una nuevos parámetros mundiales para los combustibles marítimos (IMO 2020), que redujeron el límite del contenido de azufre en el crudo desde el 3,5 % antes permitido hasta un 0,5 %.

Esa modificación «ha generado una oportunidad única para Petrobras, que produce petróleo y crudo con bajo contenido de azufre», explicó la empresa.

Según la petrolera, que es controlada por el Estado brasileño pero tiene acciones negociadas en las bolsas de valores de Sao Paulo, Nueva York y Madrid, el récord de exportaciones también refleja el resultado de las medidas adoptadas por la empresa para darle mayor prioridad a su área de explotación y producción, y para adecuar sus cargas de refino de forma a «concentrarse en productos que maximizan el margen de ganancia sin presionar los inventarios».

La dirección de la empresa anunció el mes pasado que, pese a la crisis histórica del sector provocada por la fuerte caída de la demanda global y de los precios del crudo, mantuvo su meta de concluir 2020 con una producción promedio de 2,7 millones de barriles diarios de petróleo y gas natural.

Según su plan quinquenal, Petrobras se propone elevar su producción de petróleo y gas natural en Brasil hasta 2,7 millones de barriles diarios en 2020, 2,9 millones en 2021, 3,1 millones en 2022, 3,3 millones en 2023 y 3,5 millones en 2024.

Para enfrentar la caída de la demanda y el exceso de oferta mundial, Petrobras suspendió operaciones en 62 de sus plataformas marítimas en aguas rasas a fin de reducir su producción en abril en cerca de 200.000 barriles diarios, pero en mayo volvió a elevar la producción.

La petrolera considera que el aumento de la producción le permitirá atender el mercado brasileño, que comienza a recuperarse tras una fuerte caída de la demanda, y seguir elevando sus exportaciones.