Los precios del petróleo volvieron a subir luego de una sesión de alta volatilidad este martes, caracterizada por tomas de beneficios y preocupaciones por la inflación.
Así el barril de Brent del mar del Norte para entrega en agosto ganó 0,88% a 120,57 dólares en Londres.
En tanto el West Texas Intermediate (WTI) para entrega en julio ganó 0,76% a 119,41 dólares en Nueva York.
Los precios, que tuvieron una jornada con altas y bajas, «se acercan nuevamente a sus máximos, lo cual provocó tomas de ganancias en un mercado volátil, lleno de incertidumbres», resumió Matt Smith, de Kpler.
A media jornada los precios pasaron incluso a territorio negativo luego de que el Banco Mundial revisara a la baja sus previsiones de crecimiento mundiales.
«Todo declive de actividad presiona a la baja la demanda de petróleo», resumió Andrew Lebow de Commodities research Group.
Pero, al mismo tiempo, un informe de Goldman Sachs aumentó la previsión del precio del Brent a 135 dólares para fin de año, y eso empujó los precios al alza.
En momentos en que el precio del galón (3,78 litros) de gasolina parece encaminado a alcanzar la cota histórica de 5 dólares en Estados Unidos en los próximos días, «hay temores de destrucción de la demanda», añadió Matt Smith.
«Eso tendrá un impacto sobre la demanda de gasolina. Las personas pensarán dos veces antes de hacer grandes viajes en auto», afirmó Lebow, de Commodities Research Group. Este nivel de precios de los combustibles «comenzará a ser un factor bajista», aseguró el analista.
Por otro lado, «la reactivación de la demanda con la reapertura de Pekín y Shanghai» luego de confinamientos por covid «contribuye a sostener los precios», indicó Michael Hewson, de CMC Markets.