Promotor chino Evergrande cumple con el pago de un bono offshore

El endeudado gigante inmobiliario chino Evergrande cumplió con el reembolso de los intereses de un bono «offshore» un día antes de expirar el plazo máximo, indicó un medio estatal, evitando por ahora la quiebra.

Los temores por un colapso del grupo y por sus repercusiones en la economía china han inquietado los mercados y han provocado el hundimiento de las acciones del conglomerado, que volvieron a cotizar el jueves tras dos semanas paralizadas.

Pero el viernes, el periódico estatal Securities Times indicó, citando «fuentes relevantes», que el promotor había enviado un giro por 83,5 millones de dólares que debería haber reembolsado inicialmente el 23 de septiembre.

Los tenedores del bono deben recibir el pago antes del sábado, cuando termina el plazo de 30 días de gracia que disponía Evergrande.

Una fuente con conocimiento estrecho del caso confirmó a AFP que Evergrande envió un giro por el valor reportado.

En un comunicado esta semana, el grupo con sede en Shenzhen había anunciado el fracaso de una operación para vender por 2.580 millones de dólares el 50,1% de su unidad de servicios de propiedades.

En ese mismo mensaje indicó que la reanudación de su cotización en la bolsa de Hong Kong el jueves. El retorno se saldó con una caída del 12,5% del valor de sus títulos, que se han depreciado más de un 80% desde comienzos de año.

Este viernes, después de trascender el pago de este bono, sus acciones cotizaban un 4% al alza.

Situación crítica

Aun así, los analistas advierten que la situación sigue siendo crítica a pesar del reembolso.

«Puede que hayan pagado este interés y a lo mejor pueden pagar otro interés, básicamente tienen pagos de intereses cada dos semanas. (…) Pero si miras los fundamentos de la compañía, eso no ha cambiado», dijo a AFP Chen Long, socio de la firma Plenum.

El gigante inmobiliario, con una deuda superior a los 300.000 millones de dólares, lleva semanas en el limbo y reconoció el miércoles que «no hay garantías de que pueda cumplir con sus obligaciones financieras».

Pekín, que desplegó en 2020 medidas para reducir el sobreendeudamiento del sector inmobiliario muy dañinas para Evergrande, ha insistido en que los riesgos asociados a una caída de este gigante pueden ser controlados.

Aunque pagó un bono doméstico en septiembre, se estima que la empresa ya ha faltado al pago de 150 millones de dólares de bonos en el extranjero.

Según algunas informaciones, las autoridades pidieron a los gobiernos locales que se preparen para una eventual quiebra y algunos ya han asumido ciertos proyectos del promotor, aseguran los analistas.

«Desde una perspectiva macroeconómica, no es importante si la agonizante Evergrande sobrevive. Lo importante es quién asume o no asume sus compromisos», indicó a AFP Leland Miller, consejero delegado de la firma de análisis de datos china Beige Book.

«Desde fuera está bastante claro que lo más doloroso está por llegar», afirma.