Una escena se repite prácticamente por todo Estados Unidos: largas filas de electores depositando por adelantado su voto para las elecciones presidenciales, respondiendo al llamado de movilización de los demócratas y por miedo a la pandemia del coronavirus, a menos de tres semanas de los comicios.
Más de 25 millones de estadounidenses habían votado hasta el viernes a las 15H00 GMT, por correo o en persona, según un conteo del US Elections Project, un sistema de estadísticas electorales en línea de la Universidad de Florida.
Estas cifras récord se producen en medio de una elección fuertemente polarizada entre el multimillonario republicano Donald Trump, que se presenta a un segundo mandato, y el demócrata Joe Biden, que actualmente lidera las encuestas nacionales.
Aunque las cifras están actualmente a favor del exvicepresidente de Barack Obama, la elección aún no se ha decidido, advierte el profesor Michael McDonald, quien está a cargo del conteo.
«El voto fuertemente demócrata en este momento no debería ser un indicador de que Biden tiene la elección» ganada, previno McDonald en un análisis publicado en su sitio web.
«Sí, los números son muy buenos para Biden», dijo, «sin embargo, es muy probable que los republicanos se presenten a votar en persona» el 3 de noviembre, el día de las elecciones.
En total, 43 estados y la capital federal, Washington, establecieron sistemas de votación anticipada para la elección. Se solicitaron o enviaron casi 75 millones de papeletas por correo, más del doble de los 33 millones para los comicios de 2016, y las autoridades locales establecieron buzones o puntos especiales para depositar el voto.
Estas medidas responden a una fuerte demanda de los votantes, que temen contagiarse de covid-19 si van a las abarrotadas urnas el día de los comicios.
En Iowa, un estado del medio-oeste donde el presidente celebró un mitin el miércoles, la votación anticipada comenzó el 5 de octubre, y hasta el viernes más de 454.000 electores habían emitido sus votos, según el US Elections Project.
– «Canibalizar» electores –
En Georgia (sureste), habían votado más de 1,3 millones de personas según la misma fuente, algunas de las cuales esperaron más de 10 horas para hacerlo.
La votación anticipada comenzó el jueves en Carolina del Norte (este), donde se esperaba que Kamala Harris, la compañera de fórmula de Biden, movilizara a los votantes demócratas desde Asheville.
Sin embargo, la senadora tuvo que cancelar su visita al enterarse que dos miembros de su equipo dieron positivo por covid-19.
El sureño Texas ha registrado un número récord de votos anticipados desde la apertura de las urnas el martes. Según cifras preliminares, 128.186 personas acudieron el primer día, casi el doble que hace cuatro años.
El martes, frente al estadio de fútbol americano de la Universidad Rice, en el centro de Houston, Solmaz Afshar esperaba su turno portando mascarilla y manteniendo distancia social.
«Quería asegurarme de que mi voto fuera contabilizado antes de que algo pueda suceder entre ahora y el día de las elecciones», dijo a la AFP esta enfermera de 32 años.
Trump ha criticado constantemente el voto por correo, argumentando que conduce a un «fraude de escala sin precedentes» en beneficio de su oponente. Sin embargo, no ha habido pruebas de irregularidades generalizadas en votaciones anteriores.
Su equipo de campaña acusa al partido demócrata de «asustar irresponsablemente a los votantes para que se alejen de las urnas y canibalizar a los electores el día de las elecciones en favor de una votación por correo».
Pero «los republicanos se presentarán en persona el día de las elecciones y reelegirán al presidente Trump», aseguró la portavoz de campaña del mandatario, Thea McDonald, al diario The Washington Post.
El miércoles en Des Moines, Iowa, donde las recientes encuestas prevén un resultado reñido, los partidarios del presidente dijeron que estaban convencidos de que ganaría.
«No doy mucho crédito a las encuestas, se equivocaron en 2016», dijo Sheila Dickson a la AFP.
«Veo el entusiasmo y la lealtad de la gente a nuestro país y a nuestro presidente», comentó esta madre de familia antes de asistir al mitin de Trump.