El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes la renuncia del gobierno del fiscal general Bill Barr, quien contradijo las denuncias del mandatario de que hubo fraude en las elecciones, aunque en el anuncio no se dejó ver ninguna crispación entre ambos.
«Acabo de tener una reunión muy agradable con el fiscal general Bill Barr en la Casa Blanca. Nuestra relación es muy buena, él ha hecho un trabajo excepcional. Como lo dice su carta, Bill va a dejar el cargo justo antes de Navidad para pasar las fiestas con su familia», informó el mandatario en Twitter.
En su carta, Barr dijo que estaba «muy honrado de haber trabajado en este gobierno» y destacó varios hitos de la administración. Ahora, será reemplazado por Jeff Rosen, su adjunto en el Departamento de Justicia.
El anuncio de su salida coincide con la votación del Colegio Electoral de Estados Unidos, que este lunes ratificó la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones de noviembre, pese a las denuncias de Trump de que hubo fraude y a la barricada de demandas judiciales que presentó, sin éxito.
Incluso la Corte Suprema, que tiene mayoría conservadora y tres de cuyos magistrados fueron nombrados por el mandatario, desestimó los recursos presentados.
Trump criticó en varias ocasiones la inacción de Barr en este tema, que contrasta con su historial a lo largo del mandato, durante el cual se destacó como uno de sus jefes de cartera más fieles.
A principio de diciembre, la declaración de Barr de que no constató «fraude a una escala que pudiera haber cambiado el resultado de la elección», aisló al presidente.
Algunos demócratas como el congresista Bill Pascrell no tardaron en celebrar la noticia.
«Adiós al más corrupto y despreciable fiscal general de la historia de Estados Unidos», dijo en Twitter.