Tendencias claves que marcarán al mundo después del Covid-19

El Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada de España lo tiene claro: “el mundo no va a ser igual después de la pandemia». En una de sus más recientes publicaciones sostiene que «el impacto del Covid-19 está siendo de tal magnitud que ya hay pocas dudas de que va a transformar en el medio plazo nuestro mundo social, político y económico».

El Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada ha analizado cómo puede ser el mundo después del coronavirus y ha detectado algunas tendencias que, aunque en este momento sólo estén en fase de mínima percepción, sí nos pueden dar una idea de a qué escenarios nos debemos enfrentar en el medio plazo.

«Vamos a vivir cambios sustanciales que nos conducirán inexorablemente a nuevas concepciones de los elementos de poder y soberanía de los estados, con una interpretación completamente novedosa de conceptos clásicos de la defensa, la seguridad, como bio poder o poder digital, que ahora se van a conectar aún más», reza una publicación original del instituto.

– Tendencias para un mundo después del Covid-19 –

1. Reinventar los mercados financieros. Los mercados bursátiles y de inversión han demostrado su debilidad «extrema» y la necesidad de que los gobierno y bancos centrales acudan a su socorro para arreglar los fallos en el sistema. Esto pone sobre la mesa que el intervencionismo económico, «con sus planes de salvamentos asociado, se refuerza como elemento de vigilancia y control del sistema financiero global».
2. Digitalizarse o morir. La crisis sanitaria desatada por el covid-19 nos demuestra que la obligatoriedad del confinamiento podría ser algo tan espontáneo e impredecible que demuestra la necesidad de crear el espacio para el trabajo a distancia en las empresas del mundo. «Incluso las actividades eminentemente presenciales van a tener que buscar su propio proceso de digitalización para sobrevivir».
3. El saber se hace estratégico. El impacto económico del covid-19 ha venido dado por el hecho de que muchos países enfrentaron el problema estando desprevenido: desconocían de lo que el virus era capaz. Así que en adelante, el manejo de la información se mantendrá como herramienta clave para superar el daño provocado por la pandemia: «el control de los datos de las estadísticas de salud, (…) de la investigación científica, de la estratificación social, del consumo, del sistema financiero,  va a sufrir una intervención drástica de los poderes públicos, convencidos de que quien controla sus datos controla su soberanía, enfrentado el debate entre los sistemas de protección de datos personales y la seguridad de todos».
4. Vuelven las barreras. La alerta sanitaria internacional ha reforzado el retorno de las fronteras físicas: estructuras supra nacionales, como la Unión Europea, «muestran en estas crisis sus debilidades  y cada vez va en aumento la búsqueda de soluciones individuales por parte de cada estado-nación, incluso de regiones y ciudades».
5. La guerra fría se reinventa. Muchos han sido los señalamientos sobre China respecto a la propagación del virus a escala mundial, especialmente desde Estados Unidos. Esto ha desencadenado un intercambio de reproches y, en la práctica, el desplazamiento de China hacia el papel activo en la solución, mientras que Estados Unidos enfrenta la muerte de más de 30.000 personas.