Tips recomendados por Fermín Mármol García para prevenir secuestros

El criminalista Fermín Mármol García realizó una serie de sugerencias para que los ciudadanos se mantengan fuera los radares de los plagiarios. Las recomendaciones generales refieren la necesidad de mantener una actividad social solapada, sin necesidad de llegar al paranoico extremo de sentirse hostigado. Los especialistas también afirman que los delincuentes al sentirse burlados por personas que simulan mantener una sólida prosperidad económica, terminan por tomar represalias en su contra.

Mármol García sostiene que las personas pueden reducir la incidencia del secuestro si adoptan medidas sensatas como por ejemplo evitar hacer alarde de sus éxitos económicos y financieros. En los últimos años se ha establecido que asequibles aplicaciones de los teléfonos móviles permiten a los ciudadanos mantener constante comunicación con sus familiares cuando vaya camino al trabajo o tenga que ausentarse por tramos carreteros peligrosos.

Cambiar la rutina con frecuencia constituye hasta ahora el mecanismo más barato que suele echar por tierra las pretensiones de los secuestradores, pues la ausencia de automatismos descontrola las tentativas delictivas. »Sea impredecible, evite toda rutina, cambie continuamente rutas de desplazamiento, medios de transporte, fechas y horarios de sus actividades«, indican los básicos manuales.

Cuando crea que lo están siguiendo busque otras rutas a las acostumbradas para llegar a su destino, evite las mismas calles. Los funcionarios del Grupo Antiextorsión y Secuestros y de Guardia Nacional Bolivariana (Gaes) instan a las personas a confiar en las autoridades en caso de ser víctimas de extorsión o secuestro. Algunas organizaciones delictivas se han mantenido en el tiempo debido a que sus víctimas se abstienen de formalizar las denuncias.

Las autoridades insisten en que las extorsiones y los secuestros se reducen en la medida que las víctimas interpongan sus quejas de manera oportuna, refiere el diario Notitarde. Se ha demostrado que algunos incautos terminan pagando dinero a delincuentes que se encuentran detenidos en los internados judiciales situados en diversas regiones del país.