Turismo en oriente vive una debacle que no se puede disfrazar
Prestadores de servicios de transporte marítimo en el oriente de Venezuela denunciaron la paralización de las embarcaciones y caída de los servicios debido a la gran crisis que atraviesa el país y afecta directamente al turismo nacional.
La baja del turismo en las playas y parques naturales de Venezuela y las medidas de desalojo temporal, de forma arbitraria, durante los fines de semana han afectado a un sector que cada día se sumerge en una crisis.
La frecuencia de turistas hacia las islas del Parque Nacional Mochima, en el estado Anzoátegui, descendió de un promedio de cinco embarcaciones diarias a una al día, según lo expresado por los trabajadores.
A pesar de que los conocidos lancheros intentan hacer esfuerzos para mantenerse trabajando, la situación los ha llevado a paralizarse, ya que el gasto excesivo en repuestos y la escasez de insumos superan sus ingresos mensuales.
“Entre semana salgo una o dos veces al día. Los fines de semana a veces ni salgo por no llegan personas. Los temporadistas han bajado en un 60% por ciento, a veces son las 10 de la mañana y no hemos realizado ni un viaje”, explicó José Fuentes, servicio de transporte marítimo.
Los prestadores de servicio turísticos aseguran que es imprescindible una nueva política del gobierno local para impulsar la industria y así garantizar poder seguir laborando.
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