El gobierno de Donald Trump anunció este miércoles 23 de septiembre nuevas sanciones contra el sector turístico de Cuba, como la prohibición de que personas sujetas a la jurisdicción estadounidense se alojen en propiedades designadas como pertenecientes al gobierno de La Habana, entre otras medidas.
«Los cambios restringen el alojamiento en ciertas propiedades en Cuba, la importación de licor de origen cubano y de tabaco, la asistencia o la organización de reuniones profesionales o conferencias en Cuba y la participación en determinados eventos públicos«, indicó el Departamento del Tesoro en un comunicado.
El gobierno de Trump revirtió la política de apertura hacia Cuba iniciada por su predecesor demócrata, Barack Obama, lanzando una batería de sanciones económicas para restringir los ingresos de divisas del gobierno de La Habana.
Este anuncio se produce a 40 días de las presidenciales en Estados Unidos, donde el estado de Florida es un reñido bastión electoral – con 29 votos – y donde hay una importante colonia de cubanos contrarios al gobierno de La Habana.
Este miércoles, Trump honró en la Casa Blanca a los veteranos de la fallida invasión de la bahía de Cochinos que intentó tumbar a Fidel Castro en 1961 y recordó también los 40 años del exilio en masa de cubanos hacia Estados Unidos conocido como el éxodo de Mariel.
«El gobierno cubano ha estado redigiriendo los ingresos de los viajes autorizados para su propio beneficio, a menudo a expensas del pueblo cubano», indicó el secretario del Tesoro, Steven T. Mnuchin.
Con esta actualización de las restricciones, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) va a prohibir que cualquier persona sujeta a la jurisdicción estadounidense se aloje, pague por alojamiento o haga una reserva para sí mismo o para terceros en cualquier propiedad identificada por el Departamento de Estado como propiedad del gobierno de Cuba.
La normativa también afecta a propiedades en manos de funcionarios sancionados o miembros del Partido Comunista de Cuba que estén designados con restricciones o de sus parientes cercanos.
«La prohibición del uso de hoteles propiedad del gobierno de Cuba va a implicar menos vuelos de Estados Unidos a Cuba y que los vuelos vuelvan a ser solamente para cubano-estadounidenses que visiten a su familia», explicó a la AFP John S. Kavulich, presidente de la organización Consejo de Comercio y Economía entre Estados Unidos y Cuba.